En medio de la polémica que desató el beso que el presidente de la Real Federación Española de Futbol (RFEF), Luis Rubiales, dio a la jugadora de la Selección de España, Jennifer Hermoso, durante la premiación tras ganar el Mundial Femenil 2023 en Nueva Zelanda y Australia, la madre del directivo inició una manifestación para pedir justicia por su hijo.La señora Ángeles Béjar sumó hoy martes su segundo día de huelga de hambre al interior de la iglesia Divina Pastora en Motril, al sur de Granda. Luis Rubiales fue suspendido ayer de toda actividad por la FIFA, y luego la mujer comenzó su petición. De acuerdo con la agencia EFE, se encuentra bien de salud.Antes, a la misma agencia noticiosa, la señora Béjar dijo que estaría sin comer "de manera indefinida, día y noche" hasta que se ponga fin a "la cacería inhumana y sangrienta que están haciendo con mi hijo".Según información de AP, el Arzobispado de Granada y la parroquia se abstendrían de cualquier comentario sobre la acción de la mamá de Luis Rubiales.Junto a la señora llegó una cuñada, y luego se sumó una prima del directivo español. Todas piden a la delantera del Pachuca de la Liga MX, Jenni Hermoso, que "diga la verdad" sobre la acción que ha desatado también comentarios de todos los sectores.OF