Sin la naturaleza criminal con la que se colocan los carteles de ''se busca'', pero sí con el mismo propósito de hallar un modelo que mantenga el financiamiento de los partidos de la NFL en México, la oficinas internacionales de la Liga comenzaron con el cabildeo para lograrlo, a partir de 2020.Tan sólo unas horas después de que el Presidente Andrés Manuel López Obrador, declaró que por ahora el único contrato con la NFL es el que termina este año, el director ejecutivo de la Liga a nivel internacional, Peter Griffiths, y el director general en México, Arturo Olivé, visitaron al secretario de Turismo, Miguel Torruco.En 2016, durante la semana del Super Bowl 50, el gobierno de Enrique Peña Nieto dio a conocer que pagaría 14.5 millones de dólares por cada uno de los tres partidos que se firmaron en el acuerdo. ''Los contratos firmados se van a respetar. El partido que quedó pendiente sí se va a realizar. De no hacerlo, se habría tenido que pagar por multas y daños'', dijo López Obrador, ayer por la mañana.Con el rechazo de AMLO a seguir otorgando dinero del erario público a celebraciones deportivas de carácter internacional, las opciones para que la NFL regrese a México se reducen a inversionistas y patrocinadores que desembolsen los casi 15 millones de dólares que se necesitan para compensar al equipo que cede un partido de local y los gastos de operación de la Liga.''Ahora se tendrá que ir por auspiciantes que compensen el dinero que no habrá del Gobierno'', dijo una fuente con conocimiento en las negociaciones.