El CEO de los Marlins de Miami y ex estrella de los Yankees de Nueva York, Derek Jeter, salió en defensa de los peloteros de la Florida y dijo que el brote de COVID-19 que se presentó en el equipo no fue porque estuvieran en bares, sino porque no siguieron los protocolos que impuso la MLB.“Nuestros muchachos no estaban por toda la ciudad en Atlanta. Tuvimos un par de personas que salieron del hotel. Otros que se fueron a tomar café. Un chico se fue a cenar a la casa de un compañero de equipo. No había otros invitados en el lugar. No hubo otro tipo de actividades. No estaban pasando el rato en bares, ni en clubes”, dijo Jeter para el portal CBS Sports.Los Marlins fueron el primer equipo que presentó un brote del nuevo coronavirus, del que se contagiaron 21 personas dentro de la organización. Dieciocho de los enfermos son peloteros.A causa del brote, la MLB canceló tres series en fila de la novena y apenas ayer regresaron al diamante para enfrentar a los Orioles de Baltimore. Además tuvieron que firmar jugadores para sustituir a algunos de los que dieron positivo.“Todo el equipo (que viajó a Atlanta) se puso demasiado cómodo. Los muchachos se rodeaban de otros, se relajaban y bajaban la guardia. Se reunían en grupos. No llevaban cubrebocas tanto como deberían. No estaban distanciados socialmente”, reconoció Jeter.El contagio de los Marlins sumado al de los Cardenales llevó a reconocer al comisionado, Rob Manfred, que la temporada está en peligro de suspenderse si los peloteros no mejoraban su disciplina en cuanto a los protocolos de contención, aunque finalmente la campaña siguió.Decenas de empleados de las Grandes Ligas están abocados a una función considerada vital para que se pueda completar una temporada abreviada de 60 juegos en medio del brote de COVID-19, que obligó a postergar 18 encuentros en los primeros ocho días del torneo. La misión requiere sensibilidad y diligencia, así como confianza entre los peloteros y sus patrones para la detección de contagios.Los equipos tienen otras herramientas para rastrear los contactos, como planillas con el asiento de cada jugador en un autobús y programas de viaje con detalles reveladores.El lanzador mexicano Roberto Osuna inició tarde la temporada y terminaría temprano.De acuerdo con el primer diagnóstico, el cerrador de los Astros de Houston necesitará una operación Tommy John para reparar su codo de lanzar que se lastimó el fin de semana pasado.Osuna está buscando una segunda opinión médica antes de entrar al quirófano, según el reporte de la cadena Fox en Houston.El sinaloense fue puesto en la lista de lesionados el domingo con dolor en el codo y el mánager de los Astros, Dusty Baker, habló francamente sobre su estado ayer.“No se ve muy bien, en realidad”, dijo Baker a SportsTalk790. “Fue y se hizo una resonancia magnética ayer (el lunes). Está en nuestras oraciones y en nuestros pensamientos. La realidad es que probablemente no es realmente una buena noticia”.Osuna, de 25 años, ha aparecido en cuatro partidos con los Astros esta temporada, registrando una efectividad de 2.08 con un salvamento y tres ponches. Tuvo una efectividad de 2.63 en 66 partidos con los Astros la temporada pasada, registrando 38 salvamentos.El mexicano no estuvo en el Día Inaugural pues llegó fuera de forma.JL