El director técnico de Trinidad y Tobago, Angus Eve, pidió la victoria ''en la mesa'' para su equipo, luego de que el grito homofóbico se escuchara en el sector de la afición de la Selección de México que estuvo presente en el partido del sábado, en el debut de la Copa Oro 2021, que organiza la Concacaf.El partido concluyó con empate a cero goles, pero marcado por la polémica del arbitraje, la impactante lesión del delantero mexicano Hirving Lozano en la cara, y el mencionado grito por parte de los espectadores del Tricolor en las gradas del AT&T Stadium de Arlington, Texas.Por esta última acción, el árbitro del juego, el costarricense Ricardo Montero, detuvo el partido dos veces.El técnico de Trinidad y Tobago indica que el partido debió ser suspendido, y que por eso, la Concacaf debió darle el triunfo administrativo y los tres puntos.''En tres ocasiones se debió parar el partido, tenemos que frenar este tipo de comportamientos en este deporte. Pensé que después de la tercera vez que paró el partido (aunque fueron dos veces) nos debieron dar el juego en ese momento'', señaló Angus Eve.OF