Craig Tiley, director del Abierto de Australia, reveló que los directivos del torneo contemplan cuatro escenarios diferentes para la edición del 2021, uno de ellos es la posible cancelación del torneo.No obstante, la primera alternativa implicaría que en las gradas se encuentren únicamente personas residentes de Australia para disminuir el número de traslados de aficionados extranjeros que pudieran estar en contacto con el COVID-19."El peor de los casos es que no haya Abierto de Australia. Nuestro mejor escenario en este momento es un torneo con jugadores a los que podamos acoger con cuarentena y únicamente con aficionados australianos", explicó Tiley a medios locales.El Grand Slam australiano es el único que ha podido llevarse a cabo durante el 2020, ya que Roland Garros fue reprogramado del 20 de septiembre al 4 de octubre y Wimbledon quedó cancelado por el impacto de la pandemia de coronavirus.Sin embargo, el futuro del torneo francés, así como el Abierto de Estados Unidos, todavía está en el aire y depende de la evolución de la enfermedad durante las próximas semanas.OF