Mañana, el Real Estelí se presentará en el estadio Ciudad de los Deportes con el objetivo de lograr la hazaña más grande de su historia: eliminar al América de la Copa de Campeones de Concacaf; sin embargo, el posible “cuento de hadas” no estará completo, por la desilusión de no jugar en el Azteca.“La verdad es bonito y feo. Veníamos con la ilusión de jugar en el estadio del América porque para cualquier jugador de este continente jugar ahí sería un lindo recuerdo, pero del lado bueno es que ellos no estarán en su zona de confort y de fortaleza”, comentó Byron Bonilla, futbolista que convirtió “a lo Panenka” el primero de los dos goles que convirtió el conjunto nicaragüense en la ida.Como es de público conocimiento, las Águilas dejarán el Coloso de Santa Úrsula para disputar este compromiso a raíz del concierto de la cantante colombiana Karol G. Para El Tren del Norte, que América no juegue en su estadio abre una oportunidad de oro para dar un nuevo golpe a uno de los grandes candidatos al título.“Nosotros queríamos jugar en el Azteca, sabemos lo importante que es jugar en ese campo, pero creo que estamos concentrados en sacar el resultado y eliminar al América, al actual campeón de México y uno de los más grandes de Concacaf”, agregó Harold Medina, mediocampista e integrante de la Selección de Nicaragua.
