Ante Monarcas, Chivas dio el mejor primer tiempo de hace varios torneos: generó siete opciones claras de gol, ahogó al rival, e incluso parecía por momentos que estaban en una práctica ensayando tiro al arco porque le estaban pasando por encima al rival.El primer tiempo era un festín para los rojiblancos. Llegaron igual por izquierda o derecha, por el centro o de latigazos, lo cierto es que el Morelia se defendía como podía y no sabía ni cómo no había recibido más goles que el tanto que les había marcado Ángel Zaldívar.El técnico José Saturnino Cardozo puntualizó que su equipo fue uno en el primer tiempo, y para el complemento cambió por completo pues dejó de tener la posesión de balón, la dinámica y hasta el ritmo del encuentro perdió, lo cual le costó a la larga dejar puntos en el camino."El primer tiempo fue brillante para mí, metimos al rival en su cancha y cuando intentaba salir no podía o le sorprendíamos con un latigazo, pero en el segundo tiempo creo que anímicamente nos caímos por la situación de que no marcamos y al rival le pasó lo contrario, ve que te vienes abajo y ellos suben, la verdad que nos desesperamos por no tener la pelota aunque creo que fue más por errores nuestros".Lo único que ahora le resta al Guadalajara es trabajar en la contundencia e insistir en ganar los encuentros que le restan, para buscar que se dé un milagro, el cual no es imposible pero sí muy complicado y lo sabe el técnico."Lógicamente mientras haya posibilidades de calificar a la Liguilla seguiremos trabajando, por remotas que sean las chances vamos seguir luchando hasta que termine el campeonato y nos quedan tres finales, mientras tengamos la posibilidad matemática de calificar buscaremos conseguirlo porque se lo merece nuestra afición. Si se da la posibilidad de entrar, bienvenida; si no, significa que no lo hicimos bien y tendremos que redoblar esfuerzos porque se nos viene el Mundial de Clubes".JM