En compañía de la familia, amigos, en pareja, y hasta solos, miles de personas se dieron cita esta tarde en el Estadio Jalisco para disfrutar del Clásico Tapatío, disputado entre el Atlas y las Chivas en el partido de vuelta que dará el pase al equipo ganador a la semifinal del Clausura 2022.Un ejemplo de ello fueron Jesús Rosales, su hijo del mismo nombre y su pequeño nieto Franco Molgado. Los tres son Atlistas. El abuelo Jesús es quien sembró el amor por este equipo, pues contó, desde que él tenía ocho años ya disfrutaba de las jugadas de "El Palmareño" Solís en este club, Hoy ya tiene 74 años, y para él es un gusto poder asistir al estadio en compañía de su familia."Mi papá me traía cuando yo tenía alrededor de 14 años todos los sábados. 8:45 si no me equivoco era cuando jugaba el Atlas, y desde entonces como decimos, le vamos al Atlas aunque gane. Ahora que se da el campeonato en 2021 la verdad es que nos llena de gusto seguir apoyando al partido con el que crecimos", contó Jesús Rosales hijo.Franco es el nieto del señor Rosales y sobrino de Jesús. Para él, haber visto campeón al Atlas el pasado 12 de diciembre lo hizo muy feliz, por lo cual disfruta mucho de ir al estadio en compañía de su familia, siendo Julián Quiñones su jugador favorito.Los tres coincidieron en que, de llegar a la final, el Atlas pudiera enfrentarse contra el Club Tigres de la Universidad Autónoma de Nuevo León, .Jacqueline Mulgado y Saúl López son novios desde hace un año. Ella le va a las Chivas y él, al Atlas, por ello, dijeron, este domingo fueron rivales.Todavía no eran novios y ambos salieron de viaje, según contó Jacqueline, durante el paseo él comenzó a cantar las porras del Atlas. "Dije 'no por favor, todo iba bien', pero al final lo que importó más fue la química", dijo la joven."Yo sí la pensé mucho por ese tema, pero me convenció con otras cosas y hoy seguimos juntos", dijo por su parte Saúl.Ella lo ha apoyado mucho, incluso, contó Saúl, le regaló una nueva playera de los rojinegros en su más reciente cumpleaños, aunque, dijo Jacqueline, él de verdad no tolera a las Chivas. "Cuando ganó el campeonato el Atlas le dije que no me dijera 'amor', que me dijera 'campeón', y sí, como un mes sí me dijo", recordó entre risas el joven Saúl.Hoy, tras el clásico tapatío, acordaron, quien pierda deberá pagar un viaje para los dos a las playas de "San Pancho", en Nayarit.Desde que el Atlas fue campeón en diciembre pasado Edson Coronado se ha dedicado a hacer "la gira del campeón", desde la Ciudad de México ha viajado a distintas partes de la República siguiendo al equipo."Desde pequeño soy atlista. Toda mi familia le va a las Chivas, pero yo siempre dije que iba a ser del Atlas por la rivalidad, soy la oveja negra de la familia", contó.Por ello, dijo, siempre había tenido el sueño de disfrutar de un Clásico Chivas vs Atlas desde Jalisco, y decidió viajar desde la semana pasada para presenciar tanto el partido de ida en el Estadio Akron, como el de vuelta en el Jalisco.En dicha gira también asistió al Estadio Corregidora el 5 de marzo pasado, donde ocurrió la embestida de los "aficionados" del Querétaro contra los seguidores del Atlas, recibiendo incluso agresiones que le dejaron una cicatriz en el cuello, la cual no le dejará olvidar lo vivido aquel día."Ahí está la marca. Llevo muchos años yendo a estadios y ese fue el único estadio, el único partido donde no había nada de seguridad. Sí estuvo impresionante la situación que viví, porque desde el minuto 20 del partido ya se estaban atacando, no había nada de policías, ni estatales ni municipales. Sigo creyendo que fue planeado", contó Edson.Hoy, dijo, espera que Atlas llegue a la final y se enfrente a las Águilas del América, para aprovechar que el Estadio Azteca le queda más cerca.Eduardo Camarena tiene tres años que no se pierde un solo partido del Atlas como local en el Estadio Jalisco, gracias a que cuenta con su "Pase Rojinegro" que paga fielmente de manera anual. Así pudo disfrutar de todos los partidos de la liguilla que llevó a los "Zorros" al campeonato, y ahora, de los partidos del torneo de clausura.Su juego favorito del torneo, dijo, fue el Atlas vs San Luis en el mes de enero. "Venía Atlas de ser campeón y pienso que era el partido donde Atlas iba a defender su título, y lo logró, ese día quedaron uno-cero, me parece", contó Camarena.Habitualmente asiste al estadio solo, pero ya conoce, y se ha hecho buen amigo, de las personas con las que coincide en la zona donde tiene asignados sus lugares. "Algunos los he conocido aquí, del trabajo, de otros lados. De venir al estadio se ha hecho una hermandad, cuando uno no puede venir o conseguir boletos adicionales nos echamos la mano para que puedan asistir, inclusive a varios de aquí los conocí en Colombia, cuando Atlas jugó en la libertadores en 2015", finalizó Eduardo.Llegaron entre enero y febrero a Guadalajara y su corazón ya es del Club Deportivo Atlas. Bianca, Elena y Maya son tres jóvenes alemanas que se encuentran de intercambio, quienes asistieron en compañía de sus amigos al partido disputado entre el Atlas y las Chivas.Para Bianca, Atlas es el mejor partido de México, y por eso hoy se dice gustosa de poder asistir a este encuentro en el Estadio Jalisco antes de partir de vuelta a Alemania a finales del semestre."A mi me gusta mucho el ambiente que hace el Atlas en el estadio. A mis amigos les gusta el Atlas y por eso yo le voy a ese partido", contó Elena."Además del ambiente yo le voy al Atlas y vengo hoy a este partido para vivir la experiencia en un estadio de México, dijo por su parte Maya.Las tres, dijeron, ya saben de futbol mexicano, y coincidieron en que, si Atlas llega a la final, disputarán el campeonato contra el Club América. JL