El Estadio Jalisco, antaño un fortín de apoyo inquebrantable para el Atlas, hoy se muestra desolado. Las gradas vacías reflejan una ruptura evidente entre la Fiel y su equipo, una separación que parece haber alcanzado su punto más crítico en el Apertura 2024. Lejos están los tiempos de fiesta y celebración tras el histórico bicampeonato obtenido entre 2021 y 2022; desde entonces, el panorama para el Atlas ha cambiado dramáticamente, con una afición cada vez más desencantada y ausente.Los números no mienten. Las entradas en el Jalisco, que tiene capacidad para 55 mil 20 aficionados, han sido decepcionantes a lo largo del torneo. En seis partidos jugados como local, el equipo apenas ha logrado reunir a 76 mil 646 aficionados en total. Las cifras más bajas se registraron en la Jornada 9 contra Querétaro, con tan solo 10 mil 38 asistentes, y en la Jornada 12 contra Mazatlán, donde 10 mil 690 espectadores presenciaron un deslucido empate sin goles. Incluso partidos de mayor atractivo, como el enfrentamiento ante Tigres en la Jornada 2, solo lograron atraer a 13 mil 614 fanáticos.El malestar de la afición no es un secreto. A través de redes sociales, los seguidores rojinegros han expresado su descontento con la directiva del club, que, según ellos, ha fallado en mantener una buena relación con la Fiel tras el bicampeonato. Los altos precios de las entradas, la supuesta reducción del precio de la cerveza en el último juego que para muchos resultó una farsa, la falta de cercanía con los aficionados y decisiones administrativas impopulares han sido detonantes de un ambiente tenso. El partido ante Mazatlán fue testigo de una manifestación clara del malestar, cuando un grupo de aficionados encendió bengalas en las tribunas, expresando su descontento de manera simbólica y peligrosa. Para muchos, este gesto representó el rompimiento definitivo entre la Fiel y la directiva.Luego de los títulos del Apertura 2021 y el Clausura 2022, el equipo no ha podido sostener el nivel competitivo y el entusiasmo en la afición se ha diluido. El proyecto que prometía consolidar al Atlas en los primeros planos del futbol mexicano no ha dado los frutos esperados, plantel prácticamente se desmanteló, se fueron jugadores emblemáticos como Julián Quiñones y Julio Furch; además, hoy en día, el equipo navega por la mediocridad y las tribunas lo reflejan: el amor de la Fiel, una vez incondicional, parece haber llegado a su límite.Asistencia total: 76,646 aficionadosAforo del Jalisco: 55,020 aficionadosSV
