Viajar a Granada es recorrer a profundidad la vena flamenca de España. Pero esa expresión cultural no se limita al canto, el baile y la música. También los escritores y académicos han alimentado su sonido y leyendas, siendo uno de los más notables Federico García Lorca, cuya prosa estuvo al servicio de este género y legó versos inmortales para la lengua y sobre todo, para el alma del viajero.De visita en Granada, sumergidos en el baile y la voz de los cantaores, surgió la propuesta de ir al Museo Casa Natal del escritor. Aunque eternamente ligado a esa ciudad nazarí, Lorca no era originario de ella, sino de una pequeña localidad cercana llamada Fuente Vaqueros, a unos 25 minutos en auto al Oeste desde la urbe andaluza. Tras abandonar la metrópoli, el ambiente campirano y bucólico domina la vista del viajero, pintando un lienzo en colores verdes y dorados veraniegos. Es ese paraíso llamado campiña andaluza que invita a ser descubierta. Es innegable que estamos en tierra de alma gitana y sangre poeta.Entre letras y nostalgiaEl museo funciona desde 1986, operado por el Patronato Cultural Federico García Lorca. Sí, con potente acento cultural, pero también llama poderosamente la atención su lado hogareño. La planta baja nos transporta en el tiempo, conservando la distribución original que tenía la morada cuando Lorca era un niño pequeño, daba sus primeros pasos y de sus labios emanaban las primeras palabras. Dentro de los muebles que se conservan de aquella época encontramos una cama, la cuna del escritor e incluso una tierna andadera de madera. Otros utensilios como platos, floreros y cuadros completan el cuadro.Tras atravesar esas habitaciones llegamos a un patio amplio, sembrado de enredaderas, vides y flores. Una estatua de Lorca observa a los viajeros que lo visitan. Incluso silente, su efigie nos inyecta el corazón de cierta ansia poética. El aroma a hogar es intenso. La nostalgia también.El piso superiorMientras la planta baja se caracteriza por conservar el pasado tan intacto como sea posible, es sorprendente lo hecho en la zona superior. Allí, un antiguo granero está convertido en un sala de exposiciones temporales, dónde quedan plasmadas las múltiples facetas de García Lorca. El poeta, el amigo, el solitario, el dibujante, el guionista, el músico, el crítico, el apasionado. Se despliegan en sus muros carteles de sus proyectos, fragmentos de sus poemas, pequeñas tiras cómicas en las que tomó parte. El antiguo granero está pintado con flechas, que invitan al aventurero a tomar y retomar sus pasos para dar sentido a la obra eterna del poeta. Cada año cambia su colección, aunque sus piezas más memorables permanecen, a la espera de nuevas incorporaciones y ojos curiosos.La otra habitación en la planta superior lleva por nombre Sala Anna María Dalí, la hermana del legendario Salvador Dalí y una de las amigas más entrañables de Lorca. Fue Anna María una de las más generosas benefactoras del Museo Casa Natal, donando manuscritos, cartas y postales del escritor que estaban en su poder.Dentro de la colección del museo nos encontramos con el manuscrito de su conferencia “Arquitectura del canto jondo”, clave para entender el flamenco contemporáneo; páginas sueltas de “Mariana Pineda”, la primera edición de “El romancero gitano” de 1928 y bocetos originales de Dalí, así como una de sus paletas de pintura.La visita toma poco más de una hora, y vale la pena para quienes van a Granada y buscan una actividad fuera de la ciudad pero relacionada con ella. Es imposible no sentir una conexión profunda con este lado íntimo y emocional de Lorca.Desde México puedes tomar un vuelo a Madrid. Líneas como Iberia y Aeroméxico (directo desde nuestra ciudad) te llevan. De Madrid también puedes tomar un vuelo a Granada (con Iberia), o viajar en el sistema de tren AVE desde la Estación Atocha hasta la ciudad andaluza.Ya en Granada hay diversas formas para llegar a la ciudad natal de Lorca, Fuente Vaqueros.Método Público: Toma el autobús, es el número 0335, que sale desde la estación de tren (en Av. de Andaluces). Tiene varias paradas sobre Av. Andalucía, muy útil si tu sitio de hospedaje es céntrico. Regularmente sale cada hora.Excursión privada: Este servicio incluye transporte en automóvil particular es compañía de un guía, con una visita privada que puede tomar hasta medio día. Puede llegar a costar hasta 200 euros.Además de Fuente Vaqueros, vale la pena visitar la ciudad de Valderrubio (a 2.5 kilómetros de la primera), donde se encuentra otro museo de Lorca.