Los artistas que integran los once colectivos que participaron durante la reunión virtual en el que se dio a conocer la existencia de un chat institucional titulado "Desactivación de colectivos", exigen la renuncia de la titular de la Secretaría de Cultura, Alejandra Frausto, desconocen a los funcionarios que participaron en ese grupo de mensajería instantánea, denuncian impagos a artistas que participaron en la convocatoria de la dependencia "Banco de producciones" y aseguran que continuarán trabajando para concretar la realización de un Congreso Nacional de Cultura, cuyo objetivo es estructurar iniciativas de ley para mejorar las condiciones laborales de la comunidad cultural, así como para obtener seguridad social.La tarde de ayer miércoles, el titular de Comunicación Social de la Secretaría de Cultura, Antonio Martínez, dio a conocer a la prensa cultural que había sucedido "un hecho inaceptable", pues en una reunión con colectivos artísticos "se hizo visible un chat de algunos funcionarios de la Secretaría cuyo título era "Desactivación Colectivos".Y difundió a la prensa cultural un comunicado en el cual se aseguró que la secretaria, Alejandra Frausto, se deslindaba de este grupo, y no tenía conocimiento de su existencia y funcionamiento. Se informó que los servidores públicos participantes del hecho recibieron un apercibimiento, que se analizan sanciones y que fue cesada de su cargo la persona responsable de la creación del grupo. Hasta ahora no se ha dado a conocer el nombre de ese funcionario ni cuántos ni quiénes son los funcionarios.Hoy, en conferencia de prensa virtual, representantes de los colectivos como No vivimos del Aplauso y Movimiento Colectivo por la Cultura y el Arte de México (MOCCAM), ofrecieron detalles de lo ocurrido en esa reunión, cuyo objetivo era detallar la estructura y temas del Congreso Nacional de Cultura, en el que llevaban trabajando desde febrero pasado."Nos hicieron creer que estábamos en mesas de trabajo para lograr cambios estructurales, pero sólo se trató de una simulación", dijo Guadalupe Ocampo, de No vivimos del aplauso.Y añadió: "Se llegaron a acuerdos que la autoridad desconoció. Por ejemplo, se entregaron listas de compañeros en precarización, pero atendieron a menos de 200 personas de un total de más de 4 mil personas. Les pedimos un congreso nacional para que participara toda la comunidad en el país, nos dijeron que sí en octubre pasado. Y la idea es que los resultados de ese congreso fueran resolutivos y de él emanaran iniciativas de ley. Pero la semana pasada nos regresaron otro documento que no tiene nada que ver con lo propuesto y metieron a México Creativo, de Pablo Raphael, les preguntamos que de dónde sacaron ese documento y en ese momento apareció el whatsApp".En el mensaje que se filtró participaron, entre otros, Esther Hernández, directora de Vinculación Cultural (y quien fue moderadora del encuentro); Pablo Raphael, director de Promoción y Festivales Culturales; Paula Vázquez, asesora jurídica de la Subsecretaría de Desarrollo Cultural; Ángeles Castro, directora del Centro Nacional de las Artes; Alejandra Chávez y Martha Bremauntz, directoras de la Subsecretaría de Desarrollo Cultural; Alejandro Ortiz, Francisco Romero y Valeria López.En algunas imágenes del chat, se lee, por ejemplo, a Paula Vázquez, advertir: "No. No vamos a seguir negociando nada"."Lo del chat lo tomaron con un 'ay, me equivoqué', como cuando vamos a la secundaria y con decir eso basta. Fue Martha Bremauntz quien lo minimizó, sólo pidió una disculpa. Lo único que dijo fue: 'Ay, fue un error de Alejandro (Ortiz, el responsable de la dirección de Desarrollo Académico del Cenart)'. Y pidió que pasáramos a otra cosa. No fue un error, en ese momento paramos la reunión. Existe la grabación de ese momento", explicó Eloy Hernández, de El Colegio de Productores.Añadió que la reunión no fue fructífera, pues los funcionarios ofrecieron una contrapropuesta que sólo incluía un foro de discusión."Ya no queremos seguir reflexionando sobre que no tenemos trabajo, lo que nosotros pedimos son acciones, no reflexiones, estamos cansados de reflexionar. Nos cambiaron nuestra propuesta por la conformación de un grupo técnico de reflexión y dijeron que las nuestras serían participaciones honorarias, pero ellos sí están cobrando. Nos cambiaron todo lo que propusimos. ¿Dónde está la voluntad política? No queremos chivos expiatorios. No nos vamos a dejar. Somos miles de artistas. Y somos solidarios con los de Capítulo 3000. No nos van a desactivar y pedimos que se cambie a la titular de la Secretaría de Cultura. También queremos que no continúe Pablo Raphael en México Creativo", zanjó Hernández.Por su parte, Javier Tovar, de MOCCAM, aseguró que las reuniones se habían dado en un espacio de armonía, con una dinámica muy interesante."Pensamos que por primera vez se estaba sintiendo la participación ciudadana. Había un toma y daca de propuestas, siempre con la mira a realizar un congreso nacional. Nunca se habló de intermediarios, no se habló de consejos temáticos. Con la nueva propuesta que ellos enviaron desvanecieron toda la participación ciudadana. Cuando llegamos al punto en el que no estábamos de acuerdo con su propuesta, surge el pantallazo y preguntamos de qué se trataba. Ellos estaban muy inquietos. Querían de inmediato cortar la reunión, de hecho, hasta fue amenazante cuando un funcionario, Pablo Raphael, nos dijo insistentemente que nos tendía la mano, que no fuéramos parte del problema sino de las soluciones. Nos querían imponer lo que ellos decían. La amenaza fue muy implícita", dijo Tovar.Además, el actor preguntó: ¿Desde cuándo han existido estos chats para no negociar, para hacer quebrar a los colectivos? El logro de esta administración es que ha unido a todos los colectivos en su contra, por eso pedimos su renuncia".Carolina Vidal, de la Asociación de artesanos, dijo: "Estamos más activos que nunca e invitamos a todos los artistas a actuar, nuestras diferencias son muchas, son muchas disciplinas, pero el tronco es el mismo"."Es un escándalo. Hay que ser coherentes. ¿Va a ver voluntad política o seguirá la simulación?", se preguntó Guadalupe Ocampo. Andrea Salmerón aseguró que desconocen a esos interlocutores, porque no pueden confiar ya en ellos. "Rechazamos las viejas prácticas de chivo expiatorio, no sólo es una persona, todos ellos estaban participando en ese chat. El objetivo no es pedir apoyos, no es un asunto asistencialista, es un congreso para mejorar las condiciones de trabajo del gremio cultural, de derechos laborales, de seguridad social y derechos fiscales", explicó.El diálogo, dijo Caro Vidal, está roto con los participantes de ese chat: "Si hay gente capaz de no simular, entonces seguimos abiertos a colaborar. Lo que queremos es un diálogo verdadero y resolutivo". AC