El arqueólogo mexicano Eduardo Matos Moctezuma recibió un homenaje en el Encuentro de Literaturas en Lenguas Originarias de América, que se desarrolló en el marco de la Feria Internacional del Libro de Guadalajara, y fue reconocida su amplia labor en el enriquecimiento de la arqueología y del patrimonio nacional, como su trabajo en el Proyecto Templo Mayor, uno de los más importantes que se hayan hecho en el siglo XX y que este año cumplió cuatro décadas.“Imagínense cuatro décadas de estar excavando, de estar llevando los controles que requiere la moderna arqueología e ir recuperando el pasado y lo que fue parte de nuestra historia. He tenido colaboradores fantásticos a lo largo de este tiempo para recuperar el pasado y traerlo al presente. A todos los que han estado conmigo, les agradezco”, dijo el investigador emérito.Matos Moctezuna añadió que este reconocimiento reviste importancia porque proviene del Encuentro de Literaturas en Lenguas Originarias de América. “Las lenguas no han desaparecido, son la expresión cabal de los pueblos indígenas del continente”, indicó.El arqueólogo que estuvo rodeado por sus colegas y amigos Leonardo López Luján, Miguel Ángel Navarro Navarro y Dulce María Zúñiga, indicó que día a día se cometen injusticias en contra de las mujeres y los hombres de la palabra originaria, de los hombres verdaderos como se conocen a sí mismos. “Junto a ese grito de protesta también se da el canto donde las palabras se transforman en poesía”, dijo.Por su parte, López Luján indicó que comenzó a trabajar con Matos Moctezuma y con su equipo que ha hecho florecer los estudios mexicas, desde principios de los años 80, e invitó a revisar la gran bibliografía del arqueólogo. “Si tuviéramos que definir con unas cuantas palabras al Eduardo que está a punto de cumplir sus 78 diciembres, diríamos simplemente que es un hombre jovial, particularmente inquieto y siempre lleno de proyectos, que se caracteriza por una profunda curiosidad por lo que sucede a su alrededor, al tiempo que lo guía un sentido a ultranza de la ética profesional y la responsabilidad, además de un gusto enfermizo por la puntualidad”, indicó.