En Navidad y Año Nuevo uno de los platillos preferidos para la cena es el guajolote o pavo, una ave rica en proteínas y minerales, además de otras vitaminas, y de la cual México produjo en 2017 más de 16 mil toneladas en el país.La Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader) informa que de acuerdo con datos de la Unión Nacional de Avicultores (UNA), en 2018 la producción de pavo en México registró un crecimiento estimado en 11 por ciento frente a 2017.Explica que esta ave formaba parte, en tiempos de los aztecas, de los festejos del solsticio de invierno, acontecimiento que marcaba el comienzo de un nuevo ciclo.Sin embargo, más allá de la tradición, el estudio de su carne ha motivado su consumo, toda vez que es rica en proteínas y minerales, como potasio, sodio, magnesio, calcio, hierro, zinc y vitaminas como la A y el complejo B.El presidente de la Unión Nacional de Avicultores (UNA), César Quesada Macías, informó, recientemente en un comunicado, que para la actual época de Navidad se ofertarán alrededor de un millón 340 mil pavos mexicanos.Recordó que el consumo de pavo en México va en aumento, lo que se refleja en el mercado, pues genera un estímulo a la producción del alimento en el país, como es el caso de Yucatán, entidad que hoy ocupa el primer lugar en la producción del alimento con el 18 por ciento.Asimismo, apuntó que las importaciones de pavo a México detienen el crecimiento de la producción nacional, sobre todo porque no se tiene un programa integral del volumen de pavo que se importará cada año.De ahí que la Sader sugiere que en estas fiestas decembrinas se consuma el pavo 100 por ciento mexicano, ya que con ello se apoya a los productores nacionales. OA