La obra gráfica y de caballete de los tres muralistas mexicanos más renombrados llegó a Santiago de Chile en 1973, en una exposición que debió inaugurarse el 13 de septiembre de ese año. El golpe de Estado que sufrió el país hizo imposible la inauguración, a pesar de ya tener las obras montadas en el Museo Nacional de Bellas Artes de la capital chilena. Tuvieron que pasar poco más de 40 años para que las piezas de Diego Rivera, José Clemente Orozco y David Alfaro Siquieros se pudieran apreciar en dicho recinto, pues la exposición se concretó en 2015. Desde entonces, la colección que forma parte del Museo de Arte Carrillo Gil ha visitado varias ciudades, y este 2019 llega a la capital de Jalisco.Ayer viernes se inauguró la muestra “Orozco, Rivera, Siqueiros. La exposición pendiente”, en el Museo de las Artes de la Universidad de Guadalajara (MUSA). Son 70 piezas, divididas en cuatro salas del recinto, que dan cuenta del trabajo de mediano formato de los tres pinceles más célebres del muralismo mexicano postrevolucionario.Maribel Arteaga, directora del Musa, comentó que el recinto estuvo cerca de tres años con la intención de traer esta exposición al museo universitario. Bocetos para murales, tanto en carboncillo como en óleo, litografías, retratos y autorretratos, una sección de Rivera en su estilo cubista y documentación hemerográfica conforman “La exposición pendiente”.La curaduría corrió a cargo de Carlos E. Palacios, quien retomó la curaduría original de Fernando Gamboa. Un objetivo de la lectura de Gamboa era presentar el arte mexicano de manera crítica, en su contexto político y estético. Junto a las obras, que datan del periodo entre 1915 y 1968, la exposición se refresca con documentación de la época: los catálogos hechos para la exhibición en Chile, recortes de periódico posteriores al golpe y que dan cuenta de la preocupación por las obras y el inicio del exilio chileno hacia México, fotografías del Museo Nacional de Bellas Artes y los balazos que recibió (ninguna obra fue dañada), además de un binomio de breves documentales de Bruno Salas sobre la exposición y el suceso militar. Tatiana Cuevas, directora del Museo de Arte Carrillo Gil, recordó que la idea original de la exposición en los años 70 surgió por Fernando Gamboa, asesor de Carrillo Gil y primer director del museo que lleva su nombre. Cuevas comentó que Perú, Italia y México son otros lugares donde se ha visto la muestra.Actividades paralelasSayuri Sánchez, del área de servicios educativos del MUSA, adelantó que serán cuatro las actividades que tendrán paralelamente a la exposición. Durante la estancia de las obras en el recinto, hasta marzo, habrá recorridos guiados (previa cita: grupos@musa.udg.mx). El día de la inauguración el curador Carlos Palacios brindó una charla sobre la colección Carrillo Gil, con el subtítulo de “Para una imagen internacional del arte moderno mexicano”.En marzo tendrá lugar la mesa de diálogo “Los pendientes: sobre arte, libertad, memoria y otras esperanzas colectivas”, donde se tocarán los temas aledaños al contexto histórico de la muestra, como el bagaje ideológico de los creadores y el golpe de Estado en Chile en el que el presidente Salvador Allende fue asesinado. En febrero las artes plásticas se vincularán con la literatura y la retórica, con la rememoración de dos discursos icónicos de Allende: uno de ellos de 1972, durante su paso por Jalisco en la UDG; otro el mensaje transmitido el día del golpe de Estado, poco antes de su asesinato. La literatura se hará presente con poemas de Raúl Zurita y otros vates de la llamada generación NN.“Orozco, Rivera, Siqueiros. La exposición pendiente”, en el MUSA (Av. Juárez 975, Col. Americana). Abierta al público: a partir de hoy y hasta el 22 de marzo de 2020, en los horarios del recinto: de martes a domingo, de 10:00 a 18:00 horas.