La Feria Internacional del Libro de Guadalajara (FIL) es un baluarte de Jalisco y como tal, las autoridades culturales de la Universidad de Guadalajara (UdeG) la respaldan a propósito del duelo que está viviendo la comunidad universitaria por la muerte del licenciado Raúl Padilla López, quien fuera presidente del patronato de la FIL.Ayer, durante el arranque del Maratón de la Lectura en la explanada de la rectoría de la UdeG y en el marco del Día Mundial del Libro, donde se leyó en voz alta la obra de la escritora Elena Garro, “Los recuerdos del porvenir”, se le rindió un homenaje a Padilla.Ricardo Villanueva, rector general de la Universidad de Guadalajara, expresó que cuando se despertó para ir a ésta, su primera actividad dentro del programa de la FIL, sintió la tristeza de ser el primer evento sin el licenciado Padilla, “pero también esa alegría de saber que la FIL sigue, de saber que vamos a cuidar esa obra y ese legado, y eso nos debe de dar mucha alegría también. Entonces, a todo el equipo de la FIL, que me reencuentro hoy con ustedes, mucho ánimo, nos toca cuidar a la FIL”, además pidió un aplauso para los organizadores de la feria durante las emotivas palabras que le dedicó a Raúl Padilla comparándolo con un gigante.Tras su mensaje para hacer una reflexión sobre cómo se va a conmemorar en los años venideros el legado de Padilla, pidió un minuto de silencio y enseguida se escuchó un aplauso para este importante promotor cultural que puso a Jalisco en el reflector internacional de la cultura. Además, Villanueva pidió tener mucha memoria de esta figura, honrándola y “haciendo una gran Feria del Libro el próximo año y para toda la eternidad”. En ese sentido, Marisol Schulz, directora de la FIL, respaldó lo dicho por el rector y expresó que así se hará. Luego tomó la palabra para también ofrecer un discurso cercano y conmovedor. “Efectivamente, es un día triste, es un día en el que continuaremos a partir de hoy, durante toda la vida que nos quede, honrar el legado y la memoria del licenciado Raúl Padilla”. Además, remarcó que este es un duelo activo, pues continúan trabajando.También Schulz hizo hincapié en cómo esta lectura pública se convirtió en una tradición para Guadalajara desde el año 2002. “El incansable espíritu de promoción de la cultura y la lectura por parte de nuestro presidente fundador, el licenciado Raúl Padilla López, no se limitó a crear un encuentro literario, cultural y del pensamiento más importante del mundo en español que es la FIL Guadalajara”, recordando que el alcalde Pablo Lemus narró el pasado sábado que la UNESCO hace unos días en París, al entregar los resultados de Capital Mundial de la Lectura ante el representante de dicha institución, un embajador chileno, donde se destacaba el legado de nuestra ciudad, la FIL y mencionando concretamente a Padilla López, el embajador subrayó que no había que confundirse, que la feria más importante del mundo no es la de Frankfurt (Alemania) sino la de Guadalajara.“Y como lo he repetido desde su lamentable partida, a inicios de este mes, la capacidad inventiva y visionaria de Raúl Padilla es incuantificable y su legado pervivirá en todos los jaliscienses y mexicanos que nos identificamos con la idea del poder transformador del libro y la lectura. Destacando además, Marisol, que el trabajo de Raúl Padilla hizo que Guadalajara fuera el epicentro cultural de nuestro país y de nuestro idioma, y que son casi cuatro décadas de que la ciudad es Capital Mundial de la Lectura, refrendando una vez más que Padilla ha sido el más grande promotor cultural y de la lectura que ha dado México en los últimos tiempos. El evento se desarrolló mientras era la habitual Vía RecreActiva donde también un grupo de ciclistas, a las afueras del Museo de Las Artes de la Universidad de Guadalajara (MUSA), se congregaron para celebrar el Día de la Tierra, el cual ocurrió el pasado sábado 22 de abril. Llevaban una pancarta que decía “Rodada por la Tierra”. Así que Guadalajara vivió una mañana de lectura y deporte donde se habló del legado de Raúl Padilla. En el marco del Día Internacional del Libro se llevan a cabo diversas actividades relacionadas a la escritura y lectura. Sin embargo, también existe una tradición que consiste en regalar rosas y libros.La festividad se realiza de manera anual cada 23 de abril y también se hace énfasis en el derecho de autor.Además, se promueven aspectos como la alfabetización, el aprendizaje móvil y el libre acceso a contenidos científicos y recursos educativos, esto de acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO).Durante la conmemoración se realizan talleres de fomento a la lectura, como lo son charlas de literatura, jornadas de creación literaria, simposios, presentación de libros, documentales o conferencias en distintos espacios educativos y culturales.Aunque los amantes de la literatura acostumbran a regalar rosas y libros a sus seres queridos. Pero ¿a qué se debe esta tradición?La práctica tiene su origen en una historia clásica de la literatura. El 23 de abril también se considera el Día de Sant Jordi, personaje imaginario que en la vida real se basó en la historia de un militar que se volvió santo en la iglesia.En el cuento original, el caballero Sant Jordi o San Jorge asesinó a un dragón para salvar a una princesa y de su sangre nació una rosa, razón por la que dicha flor se convirtió en un símbolo de amor, amistad y valentía para las décadas posteriores.El Universal CT