La imagen es un lugar común de los escritores: sentados en su biblioteca y acompañados de sus fieles gatos. Autores de todas las latitudes ostentan con frecuencia este tipo de fotografías en las solapas de sus libros, a sabiendas de que la quietud que ofrecen los gatos durante buena parte del día va de la mano con el silencio necesario para escribir. Esta pasión compartida entre los creadores y los felinos se ha visto reflejada también en la producción de obras (cuentos, ensayos, novelas, poemas) que tienen a los gatos como protagonistas.—“Yo, el gato”, de Natsume Sōseki. También traducida como Soy un gato, este clásico japonés propone una visión satírica sobre la sociedad, al narrarse desde el punto de vista de un gato (desde el título). Con esa perspectiva de la extrañeza el autor creó al personaje-gato, para enmarcar una extensa novela que da cuenta del espíritu de su tiempo (finales del siglo XIX y comienzos del XX).—“Gatos ilustres”, de Doris Lessing. Toda su vida Doris estuvo cautivada por los gatos. La escritora laureada con el Premio Nobel de Literatura dedicó algunas páginas para elogiarlos, pero también para tratar de comprenderlos. Este es un recuento de su experiencia y piensos sobre los gatos, desde su infancia en África.—“Gato rex”, de varios autores. Compilado por Abril Posas y editado por Paraíso Perdido, esta publicación combina el relato y la crónica, siempre alrededor de ese felino amigo que ronda por la casa. Al ser una antología, en su lectura encontramos diversidad de voces y experiencias que retratan la compañía de estos peludos cohabitantes del hogar.—“El umbral de la noche”, de Stephen King. Esta colección de cuentos del afamado autor estadounidense recopila dos de las historias donde los gatos son protagonistas, y que se adaptaron al cine con el título de El ojo del gato. Contrario a otras ficciones de King donde el animal es agente del mal, en estos cuentos los gatos juegan un papel positivo.—“La Gatomaquia”, de Lope de Vega. Un clásico del siglo de oro español, aunque un tanto desconocido para los lectores actuales. Este texto relativamente tardío del autor es un poema épico con toque burlesco, en donde la protagonista es Zapaquilda, una gata bien querida, casi como Helena de Troya.—“Crónica del pájaro que da cuerda al mundo”, de Haruki Murakami. Otro texto de origen japonés con los gatos presente es esta novela del célebre Murakami. Aquí el gato es un motor de la trama, ya que el gato del protagonista escapa de casa. Parte del desarrollo del libro se basa en esta línea argumental, con la búsqueda. —“Gato encerrado”, de Pepe Gordon con ilustraciones de Sebastián Ilabaca. Publicado por Sexto Piso, en este libro convergen múltiples formas de hablar de los gatos y otros temas, desde la poesía hasta la ciencia. Además de las ilustraciones, la edición del libro resalta al estar hecho con la técnica de pop-up.—“Lata de Sal”, editorial. Mención aparte merece esta empresa dedicada a la publicación de libros con la coincidencia de tener en su temática a los gatos. Otra característica de sus libros es que se trata de ejemplares ilustrados, aptos para leerse por toda la familia.—“Mi gato Auticko”, de Bohumil Hrabal. El autor checo hace un recuento de los gatos de su vida, con Auticko como uno de sus gatos predilectos. Proveniente de otros tiempos, Bohumil narra con frialdad la manera en que tuvo que deshacerse de tantos gatos que invadían su casa, pero también con el entrañable recuerdo de los que se quedaron.JL