Cautivado por los contrastes que un país como Estados Unidos tiene desde sus distintas trincheras políticas, económicas y culturales, Jorge Castañeda brinda una reflexión sobre la nación que durante años ha sido considerada como el “sueño americano”.A través de su más reciente libro “Estados Unidos: en la intimidad y a la distancia”, Castañeda, quien fuera ex Secretario de Relaciones Exteriores de México, explora las diferentes etapas y construcciones del país estadounidense y cómo es que desde el extranjero se aprecia su identidad, a sus ciudadanos y su vínculo con otras naciones: “Es una visión externa del país, de alguien que ha vivido, trabajado, tenido trazos con el gobierno de Estados Unidos; de alguien que ve al país con una predisposición positiva y crítica en diferentes aspectos”, puntualiza Jorge Castañeda al recordar que esta publicación fue impulsada desde hace tres años por la Universidad de Oxford para que en su edición original en inglés llegara directamente a los lectores estadounidenses; posteriormente, el libro fue adaptado al español.“Creo que es importante para los jóvenes mexicanos -el leerlo- porque un mexicano que hoy tenga entre 18 a 25 años, va vivir toda su vida con una gran implicación con Estados Unidos, probablemente tenga familia allá, va a viajar, a trabajar en una empresa norteamericana o una mexicana que se enfoca hacia un mercado estadounidense. Estos jóvenes verán cómo hay cada vez más una relación cultural entre los dos países”.En más de 300 páginas, Jorge Castañeda plantea los diferentes procesos y hechos clave que Estados Unidos ha generado alrededor de su política, la elección de sus gobernantes, el impacto de sus decisiones económicas, del racismo, la migración, la religión y también de su identidad cultural:“Uno de los mitos que los extranjeros han generado sobre Estados Unidos desde el siglo XIX, es que no existe o es muy mediocre, poca educada y burda la cultura norteamericana. Yo trato de demostrar hasta cierto punto que es falso. Estados Unidos no tuvo un Shakespeare o un Lope de Vega, no existía, pero cuando empieza a serlo y que fue rápidamente -como nación- se vuelve un país con ciertas características en materia cultural que ningún otro país ha podido hacer. La cultura norteamericana nace como una cultura de masas”.Sin embargo, Jorge Castañeda detalla que si bien Estados Unidos mantiene ese título de la “tierra de las oportunidades” en ámbitos culturales e industrias creativas, también hace hincapié en la desigualdad que la sociedad estadounidense tiene hacia sus propios ciudadanos y comunidades más vulnerables.“En materia cultural no hay la menor duda, pero en otros aspectos sí. A partir de 1970, Estados Unidos empieza a ser cada vez menos esa ‘tierra de oportunidades’, no tanto para los migrantes mexicanos o de otros países, pero para los norteamericanos las posibilidades de ascender en ingresos, vivienda, educación y hasta en salud son menores. La desigualdad dentro de la sociedad norteamericana ha crecido mucho”.JL