La Escuela de Conservación y Restauración de Occidente (ECRO) presentó parte de su plan de trabajo en su nueva administración, comandada por Adriana Cruz Lara. Además de la directora recién llegada al frente de la ECRO, la escuela se suma al organigrama de la Secretaría de Cultura, habiendo estado previamente en la Secretaría de Educación.Con un presupuesto cercano a los 13.5 millones de pesos (con 12.5 millones provenientes de fondos estatales y federales, y aproximadamente un millón autogenerados), Adriana Lara enlistó las áreas de oportunidad de crecimiento, que comienzan con una búsqueda de mejorar la gestión y actualización de sus reglamentos, desde el punto de vista legal. En el rubro académico, las posibilidades de mejora se encuentran en una revisión profunda del programa de materias, pues a un año de cumplir su 20 aniversario la ECRO ha tenido modificaciones parciales en su currícula, algo que pretenden sistematizar en esta administración.Uno de los enfoques pendientes en el programa es que los egresados tengan mayores capacidades en el tema de la gestión y la elaboración de proyectos, esencial en la experiencia profesional. Con 18 años completos, la ECRO ha egresado alrededor de 200 profesionales, muchos de ellos insertos en el campo laboral, tanto público (INAH, museos, etc.) como privado. El ciclo 2019 comienza con 86 estudiantes; su convocatoria es anual.A la par de la actualización está la creación de nuevos programas académicos, ya a nivel posgrado. De la mano de este crecimiento planean estimular el mejoramiento del cuerpo académico e incentivar la investigación. En este último tema definirán las líneas de investigación: actualmente se realiza desde los talleres (de cerámica, pintura mural, etc.). El objetivo es que desde la ECRO se produzcan artículos de divulgación.Con frecuencia la ECRO ha participado en la conservación y restauración del patrimonio en Jalisco. En ese tenor, la ECRO buscará vincularse a proyectos fuera de la escuela. Esta coparticipación generará también mayores ingresos, pues el plan es también crecer la procuración de fondos. Ceñido a los presupuestos está la actualización y los cuidados a su infraestructura: la ECRO cuenta con laboratorios y talleres especializados (de química, cerámica, etc.), cuyo costo de materiales y mantenimiento es costoso al ser de alta especialización. Arquitectónicamente, la conservación de la escuela es un tema, pues la ECRO se ubica en un inmueble tradicional del Barrio de Analco (en Calle Analco 285).Académica y laboralmente, la ECRO colabora regularmente con 17 instituciones nacionales e internacionales. En el país está El Colegio de Jalisco, la UDLAP, El Colegio de Michoacán, UdeG, ITESO, entre otros. A nivel internacional, en el continente están vinculados a universidades en Argentina, Brasil y Colombia, mientras que en Europa tienen convenios con casas de estudio de Alemania, Bélgica, España, Italia y Francia.