El autor irlandés John Banville publica este enero su novela “Quirke en San Sebastián”, la octava entrega de su serie sobre “Quirke”. Firmada con el pseudónimo de Benjamin Black y editada por Alfaguara, la novela lleva a sus personajes hasta España. Sobre los motivos para ubicar su nueva ficción en este país, el escritor platicó de manera virtual con medios de comunicación en español: “Es muy sencillo: hace unos años estuve unos días allá, cuando todavía éramos libres. Era un festival de libros en Bilbao y pasé por San Sebastián. Me encantó la ciudad. Pensé en darle a ‘Quirke’ unas vacaciones allí. Así surgió la idea: me enamoré del lugar y quise ambientar algo allí. Tal vez me salieron algunos detalles mal de la ciudad”. La relación de Banville con España ha llegado más allá del contacto con los lectores, pues su obra también ha sido galardonada con el Premio Príncipe de Asturias. Su serie (que ha sido adaptada por la BBC a la televisión en tres episodios) retrata a ‘Quirke’, un patólogo dublinés. Sobre el género negro de la literatura, el autor comentó: “Primero que nada, odio la idea de los géneros. Claro que las novelas de crímenes son literatura negra, porque hay un crimen. Pero no creo que el género signifique algo. En un libro de Georges Simenon, hay un crimen, y en uno de John le Carré hay espías”. Los siete libros previos de “Quirke” los publicó en un lapso de un decenio, entre 2007 y 2016. Ahora, un lustro después, vuelve a su personaje. Para hacerlo regresó a su bibliografía, según platicó: “Estaba escribiendo una secuela, tuve que regresar a uno de los libros para revisar datos. No suelo releer mis libros, me hacen sentir enfermo. Tuve que recurrir a los audiolibros. Ya hay algunos de Benjamin Black, leído por Timothy Dalton. Más que leerlos es una interpretación como actor. Los escuché como si no fuera el autor”.El autor recordó que Benjamin Black ha tenido éxito en los países de habla hispana, por ello permanece firmando sus novelas de “Quirke” con ese nombre. En la novela hay una aparición inesperada, con el investigador “Stratford”, protagonista de otros de sus libros. Esta inclusión fue un gusto que se dio el autor al estar escribiendo la trama de su nuevo libro: “Fue por diversión. Tenía a ‘Quirke’, un tanto cansón por su mal humor”. A propósito del goce en la escritura y la lectura, John comentó que es lo que espera que obtengan los lectores al acercarse a sus publicaciones, como “Quirke en San Sebastián”: “Simple y pura diversión, es lo que deseo que les provoquen mis libros a los lectores. Me gusta escribir libros que me gustaría leer”. Ese ánimo hedonista concuerda con otro comentario de Banville, al ser cuestionado sobre qué le han enseñado sus libros: “Escribir libros no me ha enseñado nada de la gente. A mi edad ya se sabe casi todo sobre los seres humanos. No hay nada que ya no se sepa. Encuentro a los seres humanos desconcertantes, incluido yo”.JL