El segundo concierto que realiza este año la Orquesta Filarmónica de Jalisco (OFJ) en espacios no convencionales se llevó a cabo este martes 13 de diciembre a las 20:00 horas, en Plaza Liberación, como parte de las actividades del Festival de Invierno Ilusionante que organizan el gobierno estatal y el de Guadalajara en el centro tapatío –el primero fue en mayo en el Paseo Fray Antonio Alcalde como parte de la programación de Guadalajara, Capital Mundial del Libro (GCML)– y, como ‘Concierto Navideño’, fue gratuito para las y los tapatíos, visitantes o turistas.Como es costumbre, antes de iniciar el concierto, se realizó el evento protocolario decrigor; ahí, Lourdes González, titular de la Secretaría de Cultura (SC) de Jalisco, señaló que los músicos "son los protagonistas de la noche" porque "devuelven la vida" al Centro Histórico con esta presentación de "la orquesta de todas y todos los jaliscienses".Asimismo, Pablo Lemus, alcalde tapatío, dio la bienvenida a los asistentes y aseguró que "la recuperación" del espacio público se hará "con base ennla educación, la cultura y el arte"; además, dio gracias a la SC y al Patronato de la OFJ por "siempre confiar en este proyecto" y, en especial, a los músicos "por estar el día de hoy y cerrar con este concierto su temporada final de 2022".Ahora bien, la sillería dispuesta por los organizadores fue insuficiente, los espectadores disfrutaron del espectáculo en derredor de la plaza, en torno a los adornos navideños monumentales, la iluminación de los edificios históricos a los costados (de rojo imponente) y, tras la orquesta, el Teatro Degollado con sus luces de fiesta.Para esta ocasión, la OFJ tuvo al frente a José Luis Castillo, su director artístico, y ejecutará un programa con una selección de piezas de temporada: primero ‘Estancia’, de Ginastera; luego la ‘Suite Sinfónica de El Cascanueces’, de Tchaikovsky; después la ‘Música para los reales fuegos de artificio’, de Händel; la pieza ‘Fantasia on Greensleeves’, de Vaughan Williams; la famosa ‘El teniente Kijé’ (Trineo), de Prokofiev; los ‘Cuadros de una exposición’, ‘Baba Yaga’ y ‘Gran puerta de Kiev’, de Mussorgsky; el ‘Oratorio de Navidad’ (fragmentos), de Bach; para concluir con la conocida ‘Marcha Radetzky’, de Strauss.Así, la OFJ mantuvo cautivado a un público --flotante, es verdad-- que rivalizó en cantidad con el de mayo pasado en Paseo Alcalde, pero convocado por la tradición de fin de año y sus partituras canónicas. Aplauso tras aplauso, la orquesta dio prueba del buen recibimiento que le prodiga la gente en escenarios al aire libre.Un martes que los organizadores pueden contar como acierto; la velada marcó un desempeño óptimo de la orquesta y una audiencia distinta de las de fin de semana, con niños, mascotas y jóvenes tomando su plaza al son de la música.MF