La artista multidisciplinar, Gabriela Villa, presentó su libro “Georelatos, ¿Qué historia nos cuenta el río?”, el cual consistió en el uso de fotografías y videos para retratar algunos puntos del río Sonora, como parte de una serie de proyectos de literatura extendida para el cauce de aquella Entidad.El proyecto tiene en su haber 10 cuentos geolocalizados a lo largo del cauce del río Sonora, ubicado en la entidad del mismo nombre; Gabriela Villa explicó cómo fue que surgió el proyecto: en primera instancia, tras haber superado la pandemia de COVID-19, la escritora comentó que se realizaron viajes de familia a diversas localidades aledañas al río Sonora, con la que determinaron ciertos objetos con los que podrían determinar la historia.“Me dediqué a hacer un viaje de familia en el cual, llegando a las localidades del río Sonora o aledañas, nos enviábamos la ubicación desde el WhatsApp para decir ‘¡Este es el lugar!’, este es el lugar que cuenta una historia: un avión, una piedra, una tumba muy antigua, una fábrica de tungsteno abandonada, un río muy cortito, un jabón Zote, una Farmacia del Ahorro que está disfrazada con su nombre en gis, quizá una iglesia o un tráiler”.Cada punto fue referenciado en la plataforma de internet https://www.georelatos.mx/, con la que se pueden visualizar las imágenes captadas como parte del proyecto en cada punto.Entre ellos, están los siguientes puntos: Cananea, Arizpe, Bacoachi, Banámichi, Huépac, San Felipe de Jesús, Aconchi, Baviácora y Ures.Cada uno de ellos cuenta con imágenes y proyecciones captadas en la realidad y que les fueron asignados los nombres de cada cuento.“Se generó una especie de mapa de geolocalización con la historia de cada territorio. El propósito es un libro que dialoga con este repositorio web, desde los objetos que detonan historias geolocalizadas que, a veces es visible y otras veces se aísla”.Gabriela Villa resaltó que el proyecto de https://www.georelatos.mx/ surgió durante la pandemia de COVID-19, esto al revelar que, debido al confinamiento generado por la enfermedad, buscó conocer algunas zonas de Sonora, pero desde la vía digital, por lo que impulsó la idea y llegó en la actualidad hasta un libro. Recordó que, como dice Italo Calvino en su libro “Las ciudades invisibles”, “es probable que estemos acercándonos a un momento de crisis de la vida urbana. En la actualidad se habla con la misma insistencia sobre la destrucción del entorno natural y sobre la fragilidad de los grandes sistemas tecnológicos, lo que puede producir perjuicios en cadena, paralizando metrópolis enteras”.La escritora consideró que una posible crisis de la ciudad es apenas otra cara de la misma crisis de la naturaleza o del río, al señalar que la imagen de los espacios como ciudades continuas y uniformes va cubriendo el mundo y lo dominan, pero, de alguna manera, eso está en constante crisis; se enfocó en el aprendizaje del territorio en que vivía junto a relatos comunes.“Busqué leer el territorio como se leen los mapas, como se leen las caras de las personas; leer mi territorio, buscar relatos comunes, pero ficcionados, que fueran pre-textos detonadores de historias humanas para desacelerar simbólicamente los referentes ante un universo creativo posible de los rincones que visité”.Gabriela Villa habló de una posible reflexión sobre la modificación de los patrones de desplazamiento y convivencia en las localidades por parte de los pobladores, razón por la que busca desarticular el paradigma que ha repercutido en la construcción de narrativas colectivas. Para ello, sugirió que las personas que habitan en ciudades grandes o pequeñas, ya sea la Ciudad de México, Hermosillo y Cananea miren hacia otras localidades y que quienes las habitan, se den cuenta de la tecnología que hay alrededor.Para ella, el proyecto “intenta desarticular el paradigma de uso de la red y contar historias cruzadas y atravesadas por y desde los espacios colindantes del río Sonora, buscando rincones que despojen el valor simbólico de los espacios”.Finalmente, Gabriela Villa habló de cómo el territorio importa por lo que recorrieron y agregó que el proyecto es considerado una nueva “visita a la infancia” y destacó el sentido de pertenencia.Ante las peticiones de algunos asistentes al evento hecho en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara (FIL), Villa no descartó la posibilidad de un nuevo proyecto con geoterritorios que involucren a otros estados del país como Chiapas. Gabriela Villa es artista multidisciplinar y su trabajo creativo se enfatiza en la narrativa y la poesía; en la actualidad, es responsable del área de Vinculación estratégica del Centro Mexicano de Protección y Fomento de los Derechos de Autor. G. C. y forma parte activa de distintos comités en favor de la industria editorial y artística del país.Currículum: Estudió música en el Conservatorio de las Rosas (México) y realizó un Máster en Creación Poética de Billar de Letras en España.En la actualidad, cursa la licenciatura en Educación a través de las Artes con perfiles diferenciados, esto en la Universidad Veracruzana con especialidad en Literatura.Publicaciones:Entre sus obras y trabajos, ha publicado “Páramo errante (de Mora-Cantúa Editores, 2005)”.Sus poemas han sido incluidos en ejemplares como la Antología 100 Poetak Maiatzean (Tarqus Editorial, 2019) y en las revistas Poesía Líquida (de España, 2022), así como en Círculo de Poesía (México, 2023). El proyecto de Georelatos fue seleccionado para los festivales “Semillas” de la Universidad Autónoma de la Ciudad de México, “Escenas sin fronteras” de la Biblioteca Vasconcelos de la Ciudad de México y “Cartas desde el Desierto” de la Librería Rosario Castellanos. CT