El artista Simón Cruz regresa a los espacios públicos para intervenirlos con su creatividad y talento; en esta ocasión llega al Conjunto Santander de Artes Escénicas con su obra “El gallo”. Esta pieza se suma a las otras ocho ya instaladas que conforman el Camino de las Esculturas al Centro Cultural Universitario (CCU), en la cual también participó Cruz con la obra “The Rancho”, la cual está inspirada en su perro. Anteriormente, Cruz colocó otra pieza en Avenida Lázaro Cárdenas en su cruce con Avenida López Mateos.“El arte público se muestra por sí solo, saca su personalidad de manera autónoma y llega a independizarse del artista que lo creó de tal manera que se vuelve parte de su entorno, de la sociedad: el arte de la ciudad”, comentó Simón Cruz respecto a la intervención de otras perspectivas en los espacios que son para todos los ciudadanos.Igualmente, el artista encuentra varias ventajas en el arte público: “Lo principal es que enriquece la estética de la comunidad y aporta un valor agregado a la inversión que se realiza en infraestructura pública. Hay construcciones como puentes o avenidas que llaman la atención por su tamaño o complejidad, agregar manifestaciones artísticas las embellece aún más y proporciona elementos para conformar una marca-ciudad que beneficie a todos sus habitantes”. Además, Simón Cruz explicó que vienen más proyectos de este tipo, pero que el estar en el Conjunto Santander en particular le atrajo porque se presenta en un espacio donde confluyen la cultura y las artes en todas sus manifestaciones: “Es necesario ir abriendo brecha. Y ahora sí que cada artista, en su representación de diálogo que tiene con sus piezas, es sumamente interesante. Esperemos que se siga sembrando eso, porque es el inicio de algo que da para más”.