El artista mexicano Enrique Cattaneo visitó Guadalajara para dar la charla “El papel del papel”, en el Museo de la Ciudad de Guadalajara, organizada por EL INFORMADOR. Además de la pintura, la obra de Cattaneo incluye la gráfica, en la que se ha desempeñado dentro de diferentes técnicas. A propósito de este acercamiento doble alrededor del arte, Enrique platicó, en entrevista, sobre su interés por el papel, tema central de su conferencia: “Como es el soporte que utilizo para trabajar me interesa su historia, sus inicios desde el invento del papiro con los egipcios, el papel chino, en Japón, o en nuestra cultura mexicana alrededor del año mil de nuestra era también se inventó un papel, el amate. ‘Amatl’ es la palabra náhuatl de papel”.De este material, el ponente agregó: “Finalmente soy un artista plástico, pintor, también soy impresor, editor de obra gráfica. El papel es fundamental, es mi soporte donde realizo todos los trabajos. El soporte es muy importante, tiene historia”. El formato de charla es cercano a otra de sus actividades, por haber sido docente de artes: “Soy uno de los fundadores de la Facultad de Artes de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM); el rector en ese tiempo, Gerardo Ávila, me invitó a que formara parte de la facultad”. El paso de Enrique por Guadalajara incluye una inauguración, con obras que ya habían sido vistas en nuestra ciudad: “Expuse hace unos meses, y hace unas horas, anoche, tuve la inauguración en el club de golf San Javier. Son los mismos cuadros que expuse en el Country Club en Guadalajara. Es a base de horizontes, obedecen al estilo minimalista, elimino todo lo que es superfluo y me concentro en elementos para dar una escala, volverlos visualmente más grandes”.A pesar de la referencia paisajística al horizonte, la obra de Enrique se acerca a lo abstracto: “Empecé pintando una serie de horizontes abstractos, en los ochenta y noventa. Poco a poco metí elementos figurativos. No es un paisaje realista, es figurativo con algunos elementos reales, como una arboleda, un pequeño árbol, una construcción del campo, pero lo hago para tener un elemento de contraste con un elemento real, para hacer que el cuadro se vea más grande”. De su faceta en las artes gráficas, como editor, Enrique comentó: “Cada artista es diferente, las soluciones técnicas requieren distintas soluciones. Cada obra lo es. No hay un común denominador, he trabajado con más de 250 artistas, es muy particular cómo interpretamos su obra”. Esta parte de su vida creadora data de sus inicios como artista: “Fue hace muchísimos años, cuando tenía 20 años y salí de la facultad de artes. Empecé a hacer obra mía, la llevé a una galería y les gustaron mis obras. Me preguntó si podía hacer una obra de otro artista”. Arrancó con una serie compleja de serigrafías, con más de 20 tintas y sobre papel negro. Allí tuvo que encontrar soluciones para la pieza. Posteriormente colaboró con artistas como Gunter Herzog y pintores de la ruptura, como Vicente Rojo, Felguérez, además de Alberto Gironella, Rufino Tamayo y Francisco Toledo. De su relación con los otros artistas, comentó sobre la dinámica en los talleres: “Yo domino perfectamente bien la técnica, los artistas no. Yo soy un intérprete de lo que ellos hacen, obviamente trabajamos de forma conjunta. Voy haciendo pruebas, van corrigiendo, qué cosas les gustan, qué no, para hacer las modificaciones”. Posteriormente se realiza el tiraje, una edición en ocasiones pagada por un editor o coeditada por el propio Enrique.Durante su charla, el artista y docente proyectó imágenes referentes al tema del papel, como ejemplos de papiros que traficaban los fenicios. Enrique comentó cómo el papel sustituyó a otros soportes de la escritura, como huesos y caparazones de tortuga.Entre las imágenes y los comentarios se tocó el tema de los rollos de papiro carbonizados, que con nueva tecnología se han podido descifrar. Dichos rollos se carbonizaron por la explosión del Vesubio, volcán italiano.En su recorrido por la historia del papel, Enrique se fue hasta China para explicar la técnica milenaria con la que los asiáticos dieron en salto de la escritura en bambú a la escritura en papel. A propósito del papel chino, el ponente comentó la invención de la tinta, un avance significativo que ahora damos por sentado pero que en su momento fue revolucionario. Sobre China, Enrique destacó también los antecedentes de la imprenta, con el altorrelieve en madera.La ruta de la charla continuó a la península de Corea y después a Japón, países de los cuales el expositor comentó su cultura y la relación del papel.El camino que siguió arribó hasta Italia después de comentar el papel en otros países, como España. En Italia, Enrique abundó en el papel fabriano, con las novedades impuestas por los artesanos de la ciudad homónima.Posteriormente habló del papel amate, la aportación de México. El nombre lo toma del árbol, del cual Enrique explicó sus peculiares características. De México también se charló de la primera imprenta, instalada en un edificio icónico de la Ciudad de México.Más tarde se explicó la diferencia entre el papel de madera, blanqueado con ácidos, y el papel de algodón, natural. El resultado a largo plazo difiere, aclaró, pues el papel con ácidos pierde calidad con el paso del tiempo. Finalmente, Enrique expuso los diferentes usos del papel.