La policía francesa arrestó ayer a un activista climático que organizó un ataque de protesta contra una pintura de valor incalculable de Claude Monet en el Museo de Orsay, en París, dijeron los fiscales.La mujer pegó una sábana roja a la obra impresionista “Coquelicots” (“Campo de amapolas”) y luego pegó las manos a la pared antes de ser detenida, dijo la policía.Un portavoz del Museo de Orsay, experto en restauración, examinó la pintura que está cubierta por un cristal, y comentó que no sufrió daños permanentes; de hecho, afirmó que: “La exposición vuelve a ser totalmente accesible al público.”Sin embargo, el portavoz también afirmó que se presentaría una denuncia penal por el último de los crecientes ataques culturales.La mujer, miembro del grupo ecologista “Riposte Alimentaire” (“Respuesta alimentaria”), fue detenida por daños intencionales, afirmó la fiscalía de París.En un video publicado en X, el antiguo Twitter, se ve a la mujer colocando la tela roja sobre el cuadro de Monet de un campo de amapolas rojas.En el video advierte sobre los efectos de “pesadilla” del calentamiento global.La pintura de Monet, terminada en 1873, muestra a personas con paraguas paseando por un campo de amapolas en flor y es parte de una exposición especial del Museo de Orsay llamada “París 1874, inventando el impresionismo” que presenta 130 obras de 31 artistas.Cabe señalar que la militante del grupo ecologista, además de colocar la pegatina, lució una camiseta en cuyo estampado se puede leer “+4º, el infierno”.Una alusión al aumento de temperatura de 4 grados centígrados que se espera en un escenario pesimista contemplado por el Gobierno francés, en un Plan de Adaptación al Cambio Climático.Durante su acto, la mujer advirtió que “este cuadro de pesadilla es lo que nos espera si no se pone ninguna alternativa. Con cuatro grados más, lo que nos espera es el infierno”. "Campo de amapolas" es un lienzo que Claude Monet pintó en 1873 para el que tomó como motivo a unos paseantes un campo con muchas de estas flores a las afueras de Argenteuil, una localidad a las afueras de París.Algunas de las obras de Monet se han vendido por decenas de millones de dólares, y su pintura “Meules” (”Haystacks”) se vendió por más de 110 millones de dólares en una subasta en 2019.Riposte Alimentaire se ha atribuido la responsabilidad de varios ataques artísticos en Francia en un intento por llamar la atención sobre la crisis climática y el deterioro de la calidad de los alimentos.En enero, dos manifestantes del grupo arrojaron sopa al cuadro de la “Mona Lisa” en el museo del Louvre. La obra maestra de Leonardo da Vinci está cubierta por un cristal a prueba de balas.Los atacantes fueron condenados por un tribunal de París a realizar trabajos voluntarios para una organización benéfica.En 2022, un hombre arrojó un pastel de natillas a la Mona Lisa porque, según dijo, los artistas no se centraban lo suficiente en “el planeta”.En febrero, Riposte Alimentaire arrojó sopa a otro cuadro de Monet, “Primavera”, en Lyon, sureste de Francia.El mes pasado, los activistas del grupo pegaron folletos alrededor de “La libertad guiando al pueblo”, una pintura de Eugene Delacroix en el Louvre.En abril, dos miembros fueron arrestados en el Museo de Orsay, dedicado al arte del siglo XIX, sospechosos de preparar una acción allí.Riposte Alimentaire se autodenomina “un movimiento de resistencia civil francés que pretende impulsar un cambio social radical para el medio ambiente y la sociedad”.“Amamos el arte”, ha dicho el movimiento, “pero los futuros artistas no tendrán nada que pintar en un planeta en llamas”.Monet también parece ser el blanco favorito de los activistas climáticos en otros lugares, ya que pinturas del impresionista ya fueron atacadas anteriormente en Potsdam, Alemania, y en Estocolmo.