El Museo de Arqueología del Occidente de México Lic. José Parres Arias reabrió sus puertas con una colección permanente que gira en torno a tres temáticas: actividades de subsistencia, religión y ritos, y actividad artesanal.El recinto llevaba alrededor de una década en malas condiciones y por lo tanto fue cerrado, así lo detalló la secretaria de Cultura Jalisco, Myriam Vachez, durante el evento de reinauguración: “Hace 10 años que este museo estaba prácticamente cayéndose, en ruinas y luego, cerrado. La colección Parres Arias estaba amontonada en las salas de la quinceava zona”.La Dirección General de Patrimonio Cultural de Jalisco, encabezada por Tomás Orendain, comenzó hace cuatro años las labores de recuperación para que la reapertura del inmueble fuera posible. “Después de un trabajo exhaustivo de inventario realizado por Ariel Barrera (arqueólogo), supimos exactamente lo que teníamos, entregamos una parte al INAH… En 2014, con algo de recurso que tuvimos, iniciamos el rescate de este museo tan bonito y que tenía tanta tradición que espero la vuelva a tener”.La inversión por parte de la Secretaría de Cultura para esta labor fue de un millón 750 mil pesos, tanto para “la obra como en trabajo de museología”. Trabajaron en este proyecto los arqueólogos Ariel Barrera, Marisol Montejano y Lorenza López; así como el delegado del centro INAH Occidente, Humberto Carrillo Ruvalcaba y la dirección de Patrimonio Artística, representada por Julio Herrera.Joao Rodríguez, director de Museos y Exposiciones de SC Jalisco, explicó los elementos que conforman la exposición permanente del recinto: “Estilo de Vida del Occidente de México”, en la que el visitante podrá conocer algunos de los aspectos más importantes de la vida de los habitantes prehispánicos de la región del occidente del país, enfocado principalmente en Jalisco, Nayarit y Colima.“Lo que podrán ver en este recinto es un guion museográfico dividido por colores, es una museografía de fácil lectura y amable para el recorrido, en el que los tres temas se identifican por el color: verde, formas de subsistencia: la caza y la agricultura; negro, ritos y ceremonias: la vida, la muerte y el juego de pelota como ritual, una primera representación de la tumba de caja, una forma tradicional de entierro en el occidente del país; y en color azul, manipulación y técnicas de artesanía: el metal como lo más complejo. El recorrido finaliza con la exposición de conchas, piedras y caracol en las formas artesanales”.La tumba de caja es una de las representaciones más destacadas del recinto, esta forma de entierro fue encontrada en zonas como Iztépete, Jalisco; en ésta los cuerpos se enterraban sentados con ofrendas que daban cuenta de su estatus social; aunque, la tumba de tiro es la más conocida en el Estado.Además, el visitante podrá observar piezas del año 1200 a.C. que ofrecerán imágenes de cómo era la vida prehispánica en la región a través de las representaciones impregnadas en los utensilios rescatados, como trompetas de caracol, tambores y silbatos para adentrarse en la música; representaciones de mujeres embarazadas para conocer la importancia de la fertilidad para aquellas sociedades agricultoras; herramientas para la guerra con finalidad de extender el territorio o dominar las rutas de comercio; etc.Por otro lado, el recinto, destacó Rodríguez, “cuenta también con un muro donde está la primera exposición temporal: los petrograbados de la región”. En esta sección se pretende tener continuas exhibiciones para atraer al público constantemente.El Museo de Arqueología del Occidente de México (Av. 16 de septiembre 849), estará abierto de martes a domingos de 10:00 a 18:00 horas; cuenta con guías para hacer la visita más amena y con mayores aprendizajes. Igualmente, es parte del Programa Nacional de Verano “Un verano para ti. Museos y patrimonio”.
