Teniendo al Festival Internacional de Cine de Guadalajara (FICG) como plataforma de estreno del filme “Poderoso Victoria”, su equipo de producción encabezado por el director Raúl Ramón, el actor Damián Alcázar y la productora Fabiola Velázquez, compartieron su entusiasmo por proyectar por primera vez esta historia que fue rodada entre Jalisco y Durango.Ante las diversas funciones que “Poderoso Victoria” tiene en el FICG, su elenco y producción destacó la oportunidad de que la historia no solo forme parte de la selección oficial del encuentro cinéfilo al competir en las categorías de Hecho en Jalisco y Premio Mezcal, pues confían en que más allá de acreditarse o no estos galardones al final del festival, la trama situada en el México de 1936 en el pueblo desértico de “La Esperanza”, realmente cautive al público sobre los desafíos que sus protagonistas enfrentan al ver amenazada a sus principales motores económicos: la mina de la localidad y su ruta de ferrocarril, lo que pone a discusión temas sobre la migración, la identidad la unión social.“Hacer cine en México es una labor de titanes, de gente con mucha perseverancia y tenacidad. Lo que pasó con la pandemia es algo totalmente inédito y realmente me entusiasma tanto ver que a pesar de que estamos todavía usando cubrebocas y con la guardia arriba, haya tenido esta respuesta en el FICG, que no es un festival taquillero, en el sentido que es un festival que prefiere algunas películas mucho más experimentales, abrirle la puerta a películas de directores nuevos, pero con visiones más artísticas. No me esperaba la reacción de la gente con salas abarrotadas”, explicó el director Raúl Ramón.Detalló su intención porque su ópera prima “Poderoso Victoria” llegue a las salas comerciales de frente a las negociaciones que la producción tiene en el FICG con las distribuidoras participantes y recalcó que historias con la que encabeza deben ganar terreno y prioridad para ser expuestas en la pantalla grande tradicional más allá de las facilidades que las herramientas streaming y otros formatos pueden ofrecer.Al charlar sobre el proceso de rodaje en el que también tienen protagónico Édgar Vivar, Gerardo Oñate, Joaquín Cosío, Roberto Sosa, Said Sandoval y Eduardo España, por ejemplo, Damián Alcázar reflexionó sobre los retos que la industria fílmica mexicana enfrenta, principalmente en aquellos proyectos independientes que por diversas circunstancias no reciben apoyos económicos gubernamentales para consolidar sus proyectos.“El cine no es solo un asunto comercial, es también cultura, se tiene que tomar en cuenta las dos cosas”, añadió Alcázar sobre las políticas públicas, modificaciones a fideicomisos y decisiones que desde la ley se toman para promover y apoyar más al cine mexicano: “en el Senado, seguramente tendrá que ver, con cosas como el Tratado de Libre Comercio, ahí es donde perdimos la posibilidad de que la cultura mexicana no sea sujeto de compra-venta”.Damián Alcázar hizo hincapié en la unión de voluntades no solo de los actores, productores y gremio fílmico para impulsar sus proyectos para lograr alcances masivos, al referir que es necesario exigir a las instancias gubernamentales a reforzar y generar más espacios de exhibición, promoción y recursos a la industria cinematográfica, por lo que se ha dado a la tarea de aprovechar sus encuentros con funcionarios públicos y hasta el mismo presidente, Andrés Manuel López Obrador, para que las iniciativas en beneficio del cine se concreten y no queden solo como charlas de intención.“Lo que estoy haciendo en la Ciudad de México, y lo estoy haciendo en todo el país, es promover que sea vea el cine. Con la doctora Sheinbaum (Claudia Sheinbaum, jefa de Gobierno de la Ciudad de México), fui a visitarla y hablarle del cine y las dificultades por las que atraviesa y hay un programa ‘Cine en la ciudad’, tenemos mil películas internacionales y mexicanas que se van a ver en todas las alcaldías, cineclubes y salones donde sea posible, eso es lo que quiero”.Alcázar –quien actualmente tiene estrenos en HBO con la serie ‘Asesino del olvido”- puntualizó que esta iniciativa espera verla reflejada en otras ciudades del país como Guadalajara.“Yo fui invitado casualmente a hablar con el presidente y le planteé el problema del cine, me mandó de inmediato con dos personalidades de la cultura y la difusión cultural en el país, entonces lo que conseguí, a fuerza de cuatro desayunos con ellos, es que se vea cine mexicano”.Damián Alcázar explicó que esta iniciativa también contempla que las películas se integren de manera más formal y constante a la programación de la televisión nacional como en Canal 11, con 20 películas iniciales que después migrarán a Canal 22 y Canal 14, con la intención de que más adelante también se transmitan en las señales estatales.“Yo haré la presentación de ese programa con la gente del crew, directores, realizadores, actores, fotógrafos, para hablar de la película y luego pasarla (…) después de eso tenemos todavía planes de ir a educación pública, para hablar con la Secretaría de Educación Pública, y decirle que los niños tienen que ver cine. Es pedirle que los sábados o viernes haya una sesión de cine para los niños en la primaria y secundaria para hacer audiencia, porque la audiencia se perdió cuando se perdieron las salas de cine”.El actor recalcó que no tiene ninguna aspiración política ni desea adentrarse a la política, al explicar que su intención como actor es promover herramientas de apoyo y difusión a nivel nacional.Sigue leyendo…Si te interesó esta noticia y quieres saber más, entonces descarga y descubre INFORMAPlus, la aplicación digital de EL INFORMADOR, en donde tenemos contenidos exclusivos, seleccionados por nuestros editores, para darles una experiencia más completa a los lectores.Descarga la aplicación y pruébala GRATIS por treinta días.Si eres suscriptor de EL INFORMADOR tu acceso está incluido, solicítalo al 33 3678-7777AF