Ayer viernes tuvo lugar la ceremonia de entrega de la edición número 16 del Premio Nacional de Cuento Agustín Yáñez, otorgado a Luis Jorge Boone por su colección de relatos “Suelten a los perros”. Dotado de 150 mil pesos, el certamen es el galardón más importante que entrega Cultura Jalisco, comentó Giovana Jaspersen (titular de la dependencia). Jaspersen recordó que este 17 de enero se conmemora el 40 aniversario luctuoso del escritor jalisciense, cuyo premio busca consolidar las carreras de jóvenes creadores. Para Giovana, “narrar y leer es otra forma de relacionarnos. Transforma lo conocido y lo previsible en algo memorable”.Gabriel Yáñez, hijo de Agustín, celebró que el premio que lleva el nombre de Agustín Yáñez se lo lleve Luis Jorge Boone, autor ya con trayectoria y méritos en la creación literaria: “Este reconocimiento se suma a otros importantes galardones que ha obtenido en distintos géneros (cuento, ensayo, poesía)”. A propósito del 40 aniversario luctuoso de su padre, exhortó a reflexionar sobre la opinión de Yáñez sobre la literatura en la formación educativa, en todos los niveles de estudios. Gabriel recordó el discurso de ingreso a la Academia Mexicana de la Lengua de Agustín, donde habló de la función de la literatura en la educación: influencia educativa en la sensibilidad, conciencia histórica y exactitud, variedad y riqueza del idioma como instrumento de expresión.El libro de cuentos “Suelten a los perros” fue condecorado con el Premio Nacional de Cuento Agustín Yáñez por un jurado compuesto por los escritores Gabriela Hernández, Ernesto Lumbreras y Ángel Ortuño. La ceremonia se llevó a cabo en la biblioteca del Edificio Arroniz, sede de Cultura Jalisco. Ernesto Lumbreras fue el representante del jurado y quien dio lectura al acta.Tras el mensaje que avala la decisión unánime del premio a Luis Jorge Boone, Giovana Jaspersen e Enrique Ibarra (secretario general del Gobierno de Jalisco) entregaron el reconocimiento.La literatura y la empatíaBoone ha ganado también el Premio Nacional de Poesía Joven Elías Nandino y el Premio Nacional de Cuento Inés Arredondo. “La noche caníbal”, “Los animales invisibles”, “Lados B: Ensayos laterales” y “Traducción a lengua extraña” son algunos de sus libros.Luis Jorge Boone, el escritor receptor del premio, rememoró a T.S. Eliot tras recibir el diploma, en relación con la función de la poesía y la crítica: “Una vida humana se puede gastar muy dignamente en hacer lo útil, querer lo bueno y contemplar lo bello. Yo pienso que esa es la creación”. Agregó que ese sentimiento impera también en los grandes de la literatura mexicana (Garro, Paz, Fuentes, Castellanos, Arredondo y el propio Yáñez).Para el autor originario de Monclova, Coahuila (nacido en 1977), los “premios son una palmada en la espalda”, un aliciente para quienes pasan la mayor parte de su tiempo en soledad y en las labores de escritura. “Quien lee y escribe construye el mundo y la realidad”, comentó. El poeta y narrador cerró su participación con una cita de George Steiner, al referir que una de las cosas que enseña la literatura es la empatía: “La mejor parte de nosotros guarda silencio”.Tras el breve discurso de aceptación del Premio Nacional de Cuento Agustín Yáñez, Luis Jorge Boone, Enrique Ibarra tomó la voz para destacar el marco en que se recibió la entrega: la biblioteca en el edificio de Cultura Jalisco. Igualmente elogió a su titular, por la labor que ha realizado y ponderó a la cultura como elemento vital y fundamental para la cohesión social. Ibarra estuvo de acuerdo con las palabras de Boone al hablar de la empatía.Del género del premio, recordó que el cuento es una milenaria práctica de comunicación entre los seres humanos, útil para trasmitir y mantener presente el conocimiento y la cultura. Sobre Yáñez, Ibarra resaltó la riqueza, variedad y diversidad en su aporte en la letra, docencia, cultura y política (faceta de la que habló respecto a su labor como gobernador al conectar a los municipios de Jalisco).