Mañana jueves 24, a las 20:30 horas, y el próximo domingo 27 de octubre, a las 12:30, se desarrollará en el Teatro Degollado el segundo programa de la tercera temporada 2024 de la Orquesta Filarmónica de Jalisco (OFJ), el cual tendrá un programa en el que la música clásica y contemporánea serán las protagonistas.Bajo la batuta del director huésped, el brasileño Lanfranco Marcelletti, la OFJ presentará “Fragmentos”, una obra de la compositora Marisa Rezende, quien ha sido reconocida por su innovador enfoque musical. Esto será la introducción del espectáculo, pues como parte de la celebración del 200 aniversario del nacimiento de Anton Bruckner, la orquesta ejecutará su Sinfonía número 4, conocida como “Romántica”.A propósito, EL INFORMADOR conversó con el maestro Lanfranco, quien recuerda que no es la primera vez que participa con la OFJ. “No recuerdo si esta es la tercera o cuarta vez de (colaborar) con esta orquesta que admiro mucho. Yo estuve viviendo en México por 10 años y en este periodo estuve viniendo acá alguna veces”.Sobre la experiencia con la OFJ, destaca que la alineación es de primera calidad: “Es de las mejores de México. Para trabajar con una orquesta así, se tiene que estar más preparado y con más experiencia, pues hay músicos muy buenos que saben lo que hacen, pero el placer es muy grande en el resultado que escuchas cuando naturalmente creas una posibilidad de comunicación. Yo normalmente no digo lo que quiero sino lo que pienso y esto la orquesta lo entiende rápidamente, así que esto para mí es un placer”.Refiere que el programa elegido “no es sencillo”, pero confía en el talento y disciplina de los músicos, pues expresa que saben lo que hacen, “no hay que esperar a que el director tenga que dar todo”. Sobre el repertorio, comparte que para él es un sueño este homenaje a Anton Bruckner: “Yo lo amo, soy un amante de él, espero que algún día alguien diga que soy un ‘Bruckneriano’”.También se escuchará la pieza contemporánea “Fragmentos” de la autora brasileña Marisa Rezende, una obra que al menos ya será la cuarta vez que él la ejecuta. “Es una pieza que me gusta mucho y sé que al público también le interesará porque es una obra corta, a diferencia de la de Bruckner que dura una hora con 20 minutos”.Expresa que “Fragmentos” es una intención de componer ideas musicales fragmentadas: “De hecho, alguien me dio la idea de que son estados de ánimo que se van alternando y eso es muy bonito. Dura nueves minutos, es una obra corta. La magia de la compositora está en su capacidad de crear, pues lo que siento cuando estoy dirigiendo es como si estuviera haciendo una pintura”. A propósito del desarrollo de la música formal contemporánea en Brasil, el director destaca: “En Brasil se está componiendo bastante, tenemos muchísimas orquestas porque el país es muy grande, pero todavía, para mí, no se toca la suficiente música brasileña. Yo tengo una orquesta en la ciudad donde nací, Recife, donde siempre una pieza de concierto tiene que ser brasileña y de preferencia de un compositor de nuestra región, porque hay que dar ese espacio, aunque también hay que saber cómo proponerlas”.Recuerda que hace dos semanas estrenó un concierto para trombón y orquesta de un compositor de Recife, quien escribió esta obra hace 39 años: “Nunca había sido tocada y fue un éxito entre el público. Este año hicimos al menos cuatro estrenos de compositores brasileños”. La intención es darle espacio a estas piezas actuales y que sea el público quien decida si quiere seguirlas escuchando, “hay que dejar que la historia juzgue al compositor y no nosotros”.Con respecto a su conexión con Bruckner, recuerda el maestro que él se salió de su casa en Brasil a la edad 17 años con el sueño de ser pianista y en Austria vivió con dos mujeres mayores. “Eran madre e hija, la primera tenía 90 años y la segunda 65, ambas viudas. Era una casita chiquita, ellas fueron muy generosas en dejarme (practicar) piano, pero yo no tenía mucho que cocinar y tenía que ducharme abajo. Así que comenzó una relación con esas señoras, yo les pagaba algo y me cocinaban dos o tres días; y luego me lavaban la ropa, porque yo también no tenía cómo lavar y en eso descubrí que en la sala, en la época de los vinilos, estaban todas las sinfonías de Bruckner”.Refiere además que en ese momento no sabía quién era el compositor, pero se pasó meses escuchando todas las sinfonías del músico, enamorándose de sus creaciones, lo que lo llevó inclusive a comprarse su propio tocadiscos.Finalmente sobre la particularidad de tocar la “Sinfonía 4”, expresa que si bien la pieza se llama “Romántica”, esta no se refiere al amor romántico entre dos personas, sino que el concepto va hacia un lado más espiritual y de naturaleza.Los boletos para el programa dos están disponibles en Boletia.com desde 100 pesos y con descuento del 30% válido únicamente en taquillas a estudiantes, maestros, adultos mayores, con credencial vigente; y también para personas con alguna discapacidad. Más información en www.ofj.com.mx. CT