El grabado es una técnica artística que consiste en realizar entalladuras huecas sobre una superficie de metal o de madera, llamada plancha, con una herramienta punzante o con un ácido. Esta plancha se entintará, se limpiará y se pasará por la prensa. Su estampado en papel se denomina grabado.Esta disciplina ha resurgido en Jalisco señalan expertos dedicados a ésta. Uno de ellos es Oscar Basulto, artista plástico, grabador y director de la asociación llamada “Rutas Plásticas A.C.”, quien en entrevista con EL INFORMADOR señala que ha recorrido varios municipios del Estado para impartir talleres a personas dedicadas al grabado junto con la asociación, con el objetivo de encontrar a más personas que se dediquen al grabado y puedan convertirse en maestros.“Nos encontramos con una escena de alguna manera concentrada en la búsqueda artística. Ya había talleres populares en Jalisco (de grabado), pero se concentraban en maestros que se dedicaban profesionalmente al arte. La perspectiva de nosotros es utilizar la gráfica jalisciense para desarrollar y aportar a nuestra cultura en los municipios del Estado de Jalisco. Nuestro trabajo encierra muchas cualidades como la disciplina, la puntualidad, el respeto a los maestros, el trabajo en equipo, el fomento de la limpieza del dibujo”, explica. El artista plástico celebra que exista presencia de talleres enfocados a la producción de grabados, al asegurar que se han compartido las técnicas gráficas hacia los artistas y aprendices, así como la facilidad de precios que ofertan para producir este estilo de arte y que incluyen, además, exposiciones artísticas tanto de maestros como de estudiantes de estos cursos. “Es motivador ver cómo se abren los talleres, no nada más buscando el crecimiento personal, sino compartiendo las técnicas de la gráfica a una acción más popular. Te encuentras muchos talleres abiertos con precios accesibles, con exposiciones nuevas, no necesariamente de maestros o de artistas, sino de los estudiantes de estas escuelas”. Basulto resalta que es importante impulsar al grabado para trabajar de forma comunitaria con la ciudadanía que aprecia el arte: destaca, por ejemplo, la realización de cursos artísticos en negocios y se invita tanto a los maestros como a los artistas, en donde enfatizan varias de las ventajas del grabado como sus precios, relativamente más baratos en comparación con las pinturas u otras obras de arte tradicionales. Basulto también destaca que en Jalisco hay un largo recorrido artístico en materia de oferta y demanda de obras de arte basadas en el grabado y considera que la entidad se ha posicionado como punta de lanza a nivel nacional. “Podemos encontrar a lo largo del año muy buenas exposiciones de gráfica, contamos con artistas que trabajan en el extranjero y producen ahí. En Guadalajara hay un potencial impresionante”. Al preguntarle a Oscar Basulto quiénes son los principales referentes del grabado en Jalisco, sin dudarlo nombra a: Pepe Gutiérrez, conocido por ser uno de los impresores con mayor trayectoria; a la artista del grabado, dibujante y pintora Margarita Vega, al Maestro Cornelio García y al grabador, pintor y filósofo Humberto Baca. Oscar Basulto fue uno de los artistas mexicanos que expuso recientemente en Alemania, en específico en la ciudad de Ulm, en el estado de Baden-Wurtemberg, ubicado entre Stuttgart y Múnich. Participó en una muestra colectiva de grabado contemporáneo que incluyó a artistas mexicanos como: Alejandra Carmona, Alejandro Armenta, Carlos Torres, Daniel Acosta, Darío Sandoval, Gabriela Girbau, Hugo Gutiérrez, Iskar, Manuel Guardado o Daniel Neufeld. Al respecto Neufeld comparte a esta casa editorial la experiencia que vivió en dicha exposición, la cual se llevó a cabo desde el 28 de julio hasta el 18 de agosto. Señala que la oportunidad surgió tras una invitación por parte del Ministerio de Cultura de la ciudad alemana de Ulm. Neufeld menciona que hubo cinco talleres en los que compartió su experiencia con personas de Alemania, sobre todo con niños, quienes conocieron distintas técnicas de grabado; también, trabajó con ciudadanos mexicanos radicados en aquella ciudad. “Nos invitan de parte de Ulm, del Ministerio de Cultura nos hacen una invitación a Oscar Basulto y a mí para dar talleres. Estuvimos dando cursos para toda la familia. Ofrecimos cinco en total… Talleres tal cual de grabado, en óleo, con prensa, muy sencillo, pero era para que los niños vieran cómo era la exposición y vieran cómo se hace el grabado”. Para Neufeld, en México hay variedad de zonas en las que hay una tradición amplia de grabado o gráfico y pone de ejemplo a la Ciudad de México, Oaxaca y Aguascalientes, incluyendo Guadalajara, aunque dijo que la tradición tapatía era menor por ser más reservada. “Yo creo que Guadalajara está teniendo actualmente un boom de gráfica, no porque no haya habido antes… Yo creo que Guadalajara siempre ha tenido sus grandes maestros grabadores, pero quizás era un círculo muy pequeño o un círculo muy exclusivo y no sé por qué razón… Tal vez ahora empezaron a proliferar los talleres de gráfica y los jóvenes artistas se están interesando en hacer estas prácticas”. Neufeld considera que quienes se han sumado al resurgimiento del grabado en Jalisco son personas que provienen de las academias de artes, autodidactas o aprendices por su propia cuenta, de las escuelas de diseño, del grafiti o del arte callejero, por lo que se han multiplicado los estilos de grabado dependiendo de los artistas. Finalmente, añade que hay variedad de trabajos en grabado que se realizan en Guadalajara, por lo que opina que debe haber un impulso a estos artistas con el fin de que lleguen a más rincones del mundo. Humberto Baca, productor de grabado y artista, respalda la postura de Oscar Basulto respecto a que hay un resurgimiento del grabado en Jalisco, aunque añade que hay una discusión entre los artistas por el surgimiento de la inteligencia artificial (IA) y la posibilidad de que ella reemplace a los creadores de cualquier tipo.“En estos últimos meses ha renacido la discusión por la aparición de la IA que genera imágenes a partir de frases que le indicas. Están comprometiendo profesiones como la arquitectura que está entre las carreras menos artísticas, pero tiene algo de arte”. Sin embargo, en su opinión, descarta que el arte se vea afectado por la posibilidad de que la IA supla a los artistas.“El arte escapa a esa problemática, no creo que sea posible que el arte desaparezca, porque tiene un componente poético y en ese sentido, escapa a cualquier problemática moderna utilitaria siendo el arte algo inútil; se vuelve complejo entenderlo desde la perspectiva moderna porque lo único que le interesa es la utilidad”, indica Humberto Baca. Señala que el arte hace gala de la locura y la poesía, de ahí que considere que hay una resistencia del arte hacia la influencia de la modernidad. Baca complementa que hay un resurgimiento del grabado, aunque, en su opinión, cree que siempre ha estado ahí, solamente que hay periodos en que se nota más su visualización. “Hay periodos, pero lo general las personas opinan que el arte sí importa, pero no tanto, lo importante es que la producción exista; entonces, cuando uno ve y dice que no había grabado es porque no lo veías, pero ahí estaba, igual la poesía y otras artes. De pronto se ve más y se nota más y yo diría que estamos en un periodo que se nota más, porque hay un cansancio del arte conceptual, de las instalaciones que surgieron en los años ochenta”. Agrega que la pandemia de COVID-19 tuvo gran influencia en el resurgir de las artes como el grabado en la vida actual, ya que, tanto los artistas como las personas pasaban más tiempo en casa y requerían distracciones. “Yo creo que también tuvo algo que ver la pandemia que nos metió a las casas, entonces, tú quieres decorar tu casa, cómo la arreglas, cómo tener algo entonces, en una de esas caes en el vicio del arte y de tener algo colgado en la pared”. Por su parte, Humberto Baca también menciona a los que califica como los principales referentes en cuanto al grabado; incluye algunos artistas con los que tuvo la oportunidad de laborar.- José Luis Cuevas - Francisco Toledo - Gilberto Aceves NavarroAsimismo, el artista expresa que México es un importante semillero de talentos artísticos de grabado y aclara que este trabajo no se trata de hacer copias de pinturas, sino que cada grabado sea único en su tipo. Los primeros registros del grabado se dieron en China, alrededor del siglo XIII; mientras que en Europa llegaría hasta el siglo XV, aunque fue hasta cuatro siglos más tarde, durante el siglo XIX, que llegó a México.Se considera al italiano Claudio Linati como la persona que introdujo el grabado a nuestro país mediante la litografía, procedimiento que reproduce un dibujo en un papel mediante la piedra. Joaquín Heredia y Plácido Blanco fueron los primeros exponentes del grabado mexicano con sus ilustraciones del “Gallo Pitagórico”, caricaturas que atacaban al gobierno del entonces presidente Antonio López de Santa Anna. A finales del siglo XIX continuó la crítica hacia el gobierno mediante ilustraciones hechas en grabado, siendo uno de los personajes más importantes José Guadalupe Posada, quien hizo del grabado en zinc un arte.Con la llegada de la Revolución Mexicana, el grabado alcanzó otro punto con Ángel Zamarripa quien retrató a uno de los personajes más importantes de la historia: Emiliano Zapata. En 1921 llegó a México el francés Jean Charlot, quien impulsó a grabadores mexicanos como: Ramón Alva de la Canal, Ezequiel Negrete, Leopoldo Méndez, Gabriel Fernández Ledesma y Fernando Díaz de León. En 1937 nació el “Taller de la Gráfica Popular”, encabezado por Méndez, Luis Arenal Bastar y Pablo O’Higgins, artistas interesados en la lucha social, la política y la búsqueda de justicia. En 1947 fue fundada la Sociedad Mexicana de Grabadores que buscaba difundir este tipo de arte y 20 años más tarde se creó el grupo “Nuevos Grabadores”. Durante la segunda mitad del siglo XX y el siglo XXI, el grabado continúa con relevancia, principalmente para hacer soporte de la crítica social y difusión del arte en México. CT