El artista Alejandro Fournier inaugura este jueves su exposición individual “El que todo lo ve desde el bosque”, dentro del Museo de Arte Raúl Anguiano (MURA). Se trata de una selección de 52 piezas en diversos formatos y disciplinas que dan cuenta de su actividad artística. Una serie de fotografía que va narrando una historia, tres pinturas, instalación y esculturas son parte de las creaciones de Fournier que estarán expuestas. La curaduría es de Olga Margarita Dávila y Javier Cárdenas Tavizon.Con una trayectoria desde 1997, cuando comenzó con fotografía y videos, el artista mexicano ha ido explorando nuevas formas a partir de Sector Reforma, colectivo fundado en 2003. Así comenzó su recorrido por otros medios, con un perfil multidisciplinario que llega hasta la música. En la sala del museo que alberga la muestra hay una batería que da cuenta del alter ego musical de Alejandro, Joe From Wisconsin, del cual presentará mañana mismo su sexta producción: la pieza es una batería montada de la manera tradicional, pero que se ve fragmentada por el muro que divide las dos áreas de la sala.En los ‘toms’ de la batería, Alejandro colocó impresiones de un paisaje boscoso, de lugares que visitó durante su proceso creativo en los últimos años: sobre la batería hay dos baquetas, para que los asistentes intervengan sonoramente el lugar y “den un golpe” al paisaje rítmicamente.El mismo paisaje de la naturaleza se aprecia en la serie fotográfica, que en un principio muestra a dos protagonistas, una mujer y un varón desnudos. Con ellos y en el resto de las piezas hay referencias a la icónica obra de El Bosco, titulada “El jardín de las delicias”. El avance de la serie en ambas salas da cuenta de una dualidad y un recorrido en los ciclos, parte de las reflexiones de los artistas (tanto de Fournier como de El Bosco).En las fotografías está presente un elemento que toma diferentes matices según la pieza: fragmentos de espejos que reflejan al espectador. Su presencia va ligada al título de la exposición, que resalta la mirada: “El que todo lo ve desde el bosque”. Al final del recorrido una pieza muestra otra frase que complementa la idea: “El campo tiene ojos; el bosque tiene oídos”.Una de las piezas dentro de la exposición individual es fruto de una colaboración con el artista Manuel Mathar, originario de Mérida. El invitado trabajó a partir de una imagen que Alejandro le envió, y que resultó en la portada del disco de su proyecto musical paralelo a las artes plásticas, Joe From Wisconsin. Para Fournier, la faceta musical viene de familia, pues su padre ejerció la música, la cual ve como una extensión de lo que hace.Entre las esculturas que presenta resalta una de un astronauta, que de frente viste el típico traje para ir al espacio, aunque por detrás luzca desnudo. Hecho con cantera, la pieza cobra vida literalmente en su parte superior, al tener hongos colocados ex profeso por el artista.Cabe destacar que la realización de este proyecto tuvo el apoyo del Fondo Nacional para la Cultura y las Artes, a través de su Sistema Nacional de Creadores de Arte, del cual Fournier fue beneficiario en el periodo 2016-2019.
