Intel subraya el aporte y el talento de Latinoamérica para su crecimiento
Representantes regionales de la empresa destacaron la importancia que tienen para las operaciones las instalaciones situadas en México y en Costa Rica
La empresa tecnológica Intel destacó este jueves el aporte del talento humano de Latinoamérica para el crecimiento de la empresa en innovación y desarrollo de microprocesadores, así como para el impulso de las estrategias con miras a un futuro lleno de desafíos.
Representantes regionales de la empresa destacaron en un encuentro virtual con periodistas la importancia que tienen para las operaciones las instalaciones situadas en México y en Costa Rica, donde se llevan a cabo labores de ingeniería y desarrollo, así como de prueba y ensamblaje de los microprocesadores.
"Hemos demostrado que somos una región competitiva, que en lo que somos capaces de hacer estamos en igualdad de condiciones que Estados Unidos y Asia", manifestó el gerente de operaciones global para Desarrollo de Gráficos de Intel Costa Rica, Ronny Ramírez.
Con el fin de sostener la demanda tecnológica del presente y del futuro, así como para diversificar la cadena de suministro de la industria, que se concentra 80 % en Asia, la compañía informó que ejecuta inversiones en todo el mundo incluyendo 20.000 millones de dólares en dos nuevas fábricas en Arizona, Estados Unidos, y 600 millones de dólares en Costa Rica.
El objetivo es balancear la cadena de suministro para el año 2030, en donde al menos 50 % del trabajo se realice en América y Europa, y el otro 50 % en Asia.
El proceso de diseño y manufactura es muy complejo y son etapas en la que las instalaciones de Intel en México y Costa Rica cumplen un papel central.
Los ingenieros y científicos del Centro de Diseño de Intel en Guadalajara, México, desarrollan tecnologías que serán utilizadas en el proceso de fabricación de un semiconductor.
Por su parte, Intel Costa Rica participa en varias de estas fases como la creación de mascarillas que contienen la información que se utilizará para cada paso del proceso de fabricación.
Otra de las etapas en las que Latinoamérica juega un papel relevante es en la prueba y el ensamblaje. La planta de Intel en Costa Rica es una de las pocas en el mundo que realiza este proceso, donde cada chip se ensambla en un empaque que lo protege y le permite conectarse a otros componentes, para que finalmente se pruebe su funcionalidad.
JL