Familias rusas y ucranianas piden asilo a EU desde Tijuana
El Instituto Nacional de Migración confirmó el arribo de hasta 20 personas por día provenientes de ambos países a Tijuana. quienes esperan entrar a Estados Unidos
Familias de Rusia y Ucrania que han visto sus vidas expuestas por la guerra en la zona están arribando de manera constante y numerosa a Tijuana para solicitar asilo político en Estados Unidos, como constataron varios medios locales.
Autoridades del Instituto Nacional de Migración (INM) confirmaron que desde el inicio de la invasión rusa han detectado un incremento en el arribo de personas de estos países a Tijuana; detallan que diariamente llegan hasta 20.
Claudia Pérez, agente de migración, reveló que en su mayoría son inmigrantes de origen ruso, pero que ahora comienzan a llegar más familias desde Ucrania.
"La gente de mi país está aprovechando que hay un vuelo directo a Cancún, también llegan a la Ciudad de México"
"Llegan y solicitan su estancia legal en México, les ofrecemos albergues pero no los quieren, se quedan en hoteles y se mueven por su propia cuenta", indicó la funcionaria. Este viernes, un grupo de 17 personas, entre ellos dos familias de Ucrania, una de Rusia y una pareja de Bielorrusia, arribaron al puerto fronterizo de San Ysidro para solicitar el asilo en Estados Unidos, pero agentes de la Oficina de Protección Fronteriza les impidieron la entrada.
Una de las inmigrantes ucranianas compartió que llegó a México a principios de marzo junto con toda su familia. Relató que tuvo que desplazarse desde su hogar hasta Rusia, donde tomaron un vuelo a Cancún, en donde compraron carros para trasladarse a Tijuana, un trayecto que duró 10 días.
"La gente de mi país está aprovechando que hay un vuelo directo a Cancún, también llegan a la Ciudad de México", dijo la mujer, y agregó que aunque son viajes largos, "valen la pena para poder resguardar nuestras vidas".
Andrii, otro inmigrante ucraniano que llegó con su esposa y sus dos pequeñas hijas, compartió que, aunque vivían felices y no pensaron que pasara algo con ellos, "mis amigos y vecinos comenzaron a abandonar la ciudad, y un día cayó una bomba a 300 metros de nuestro hogar y decidimos salir a Europa y luego a México", aseguró.
AHG