Concluyen funerales de integrantes de familia LeBarón asesinados
Sepultan a Christina Langford Johnson en Colonia LeBarón
Familiares y amigos despidieron el sábado a la última víctima por sepultar tras la emboscada de un cártel que cobró la vida de nueve mujeres y niños, miembros de una comunidad mormona LeBarón.
Durante el ataque a tiros del lunes, ChristinaLangfordJohnson salió de su vehículo a toda prisa y agitó las manos en lo alto para mostrar que no representaba amenaza alguna. Los niños que sobrevivieron a la emboscada dijeron a miembros de su familia que de todos modos la mujer fue acribillada a tiros y recibió dos disparos en el corazón. Su hija FaithMarieJohnson, de siete meses, fue encontrada ilesa en un asiento del vehículo.
El sepelio de la mujer, el tercero en igual número de días, cierra un emotivo periodo de luto en una comunidad unida y que tiene lazos familiares en dos estados mexicanos y al otro lado de la frontera, en varios estados del oeste de Estados Unidos.
Más de 300 personas abarrotaron el sábado la iglesia local en la comunidad LeBarón, en Galeana, Chihuahua, donde la palabra "mommy" (mami) estaba escrita con flores blancas al lado de un corazón formado con rosas.
AmeliaLangford, madre de la mujer asesinada, elogió a su hija y la describió como una "mamá gallina" muy protectora de sus seis hijos.
"México era su paraíso", dijo Amelia Langford.
Otros recordaron a Cristina, que este mes cumpliría 32 años, como una amante de la naturaleza, las flores silvestres y el piano.
Jeremiah Garret Langford, que presidió el funeral, agradeció a los dolientes que vinieron desde La Mora y recordó que tuvieron que cruzar "una zona de guerra".
El poblado de La Mora, de unas 300 personas, fue creado hace décadas por sus ancestros mormones en el estado vecino de Sonora. La masacre traumatizó a los habitantes, dedicados a la cría de ganado y el cultivo de granadas.
El ataque ocurrió cuando las mujeres viajaban con sus hijos a visitar a unos parientes. Muchos miembros de la comunidad se preguntan si se quedan o huyen de la presencia de los grupos delictivos, una constante tanto aquí como en la comunidad emparentada de Colonia LeBarón al otro lado de las montañas.
IM