Afectados por sismo pasarán la Navidad entre campamentos y recuerdos
Los damnificados por el sismo del 19 de septiembre están en espera de recibir un apoyo de vivienda por parte del gobierno
Este domingo, varios de los damnificados por el sismo del 19 de septiembre de este año en la Ciudad de México pasarán la Nochebuena en campamentos cercanos a los inmuebles afectados por el movimiento telúrico, donde desde hace tres meses cuidan sus pertenencias.
Don Enrique Alcántara tiene 64 años, es damnificado del sismo del 19 de septiembre pasado y aún resguarda lo que por nueve años fue su hogar y su trabajo. Vivía en el edificio de Concepción Béistegui y Yácatas, en la colonia Narvarte Poniente, y junto con tres personas más que moraban ahí pasará la noche cuidando recuerdos.
Para Estela Miranda, de la calle Sabina 46, en la colonia Valle Gómez, de la delegación Venustiano Carranza, es la misma realidad, la cena que recibieron fue donada por una iniciativa ciudadana en días pasados, pero este domingo en la noche estarán solos, esperando al igual que Enrique, la resolución de la situación de sus viviendas.
En esos lugares, donde instalaron un campamento correspondiente a cada uno de esos edificios, establecieron turnos para que algunos fueran a visitar a sus familias y volvieran, aun cuando asociaciones civiles los han cobijado y algunos tantos han conseguido otros espacios para habitarlos, muchos de ellos siguen viviendo desde hace tres meses en tiendas de campaña.
Estela Miranda, del campamento de la calle Sabina 46 explicó a Notimex que para ellos la Navidad fue este sábado al recibir cenas navideñas y juguetes para los siete niños que viven ahí; sin embargo, con la voz entrecortada señala que la mayor parte de tiempo tratan de estar de buen ánimo, aunque por momentos les llega la nostalgia.
Tras el sismo de septiembre pasado son 45 las personas afectadas y 10 aún viven en tiendas de campaña, una buena parte partirá con sus familias, pero Estela, tres personas más y Coffee, un perrito que resguarda celosamente ese lugar, se quedarán a pasar la Nochebuena en ese sitio.
El refugio se ubica frente a la pequeña puerta negra del edificio que aún no se sabe cuándo será demolido, en el mismo predio hay una tienda de abarrotes, y por ahí, entran al baño los integrantes de las 10 familias que desde hace 90 días velan por su patrimonio.
Aunque ya existen acercamientos con el Instituto de Vivienda de la Ciudad de México "ahorita todo está parado, todo será hasta enero, por la Navidad". comentan.
Enrique Alcántara también se quedará en el refugio habilitado para los afectados del edificio de Concepción Béistegui y Yácatas, en la Narvarte, ahí, junto con otros tres vecinos montará una guardia para que los otros habitantes que aún esperan la resolución de su situación vayan a cenar a su casa, con su familia.
A diferencia del de Doña Estela, el campamento en donde vive don Enrique ha recibido más ayuda, y este domingo ya tienen su cena de Navidad que les fue donada por una iniciativa ciudadana, aunque señaló que aún hay muchas personas que se quedarán sin cena esta noche.
Don Enrique trabajó en la planchaduría del edificio durante nueve años; ahí, tenía un cuarto donde vivía y aunque no es propietario ni nada, se queda a apoyar a sus vecinos.
En espera de recibir un apoyo de vivienda por su edad y la pérdida de su empleo, él continúa planchando ropa en las calles; antes del sismo dejaba sin arrugas entre 40 y 60 prendas diarias, después del terremoto, "ha bajado mucho la chamba".
AB