Ven riesgos en reforma a pensiones de Kumamoto

Pedro Kumamoto y Juanita Delgado, quienes conforman la fórmula independiente que busca llegar al Senado de la República, proponen “pensiones dignas” y una cobertura de 100% en todo el territorio nacional. El equipo de estos aspirantes asegura que esta modificación se compondrá de tres acciones: integrar el actual sistema pensionario fragmentado en diversos esquemas federales y estatales en uno solo; incentivar el ahorro voluntario de los trabajadores con capacidad de hacerlo, e impulsar un régimen de financiamiento con fondos gubernamentales que se obtendrían a través de la condonación de créditos fiscales, de los recursos procedentes de la Ley #SinVotoNoHayDinero y de excedentes de Pemex y la CFE.

Estas acciones implicarán modificaciones en el marco normativo de las pensiones en México, como el Artículo 113 constitucional, y las leyes que regulan el Seguro Social, el Sistema de Ahorro para el Retiro, o la del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado.

Pertinencia

Hoy el sistema de pensiones en México se encuentra fragmentado. De acuerdo con la OCDE, cada régimen tiene diversos requisitos (tasas de contribución, cuotas sociales, contribuciones de Gobierno) y beneficios que generan grandes desigualdades. En el país, los principales son el de los trabajadores del Estado (por medio del ISSSTE), los del sector privado (que en su mayoría están afiliados al IMSS), y otros esquemas ofrecidos por paraestatales nacionales como Pemex.

Tras las reformas al sistema de pensiones de 1997 (para trabajadores del sector privado) y 2007 (para los del sector público), se conformó un nuevo sistema de contribución mediante fondos privados de retiro o Afores, administradas por un grupo de instituciones financieras reguladas por la Consar. Sin embargo, México es uno de los últimos lugares en contribución privada a las pensiones, con 6.5% del salario total, según la OCDE.

Ante la modificación del bono demográfico en México, que consistirá en el incremento de los adultos mayores en los próximos 15 años, esto presionará al actual sistema pensionario mexicano, que no alcanzará para dar un retiro digno a su población mayor.

Viabilidad

Andrea Bussoletti, investigador del Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades (CUCSH), considera positivo que Kumamoto y Delgado pongan las pensiones como tema de debate. Sin embargo, cuestiona la viabilidad de utilizar el ahorro de la Ley #SinVotoNoHayDinero.“La veo como una vinculación forzada”. Añadió que a su parecer “es un mecanismo un poco electoral o de campaña, al límite de la demagogia”.

Para el académico, lo más complicado de la propuesta de Kumamoto es justificar cómo, cuánto y de qué manera se obtendrán los montos económicos previstos por el candidato para estimular el sistema de pensiones en México. Además, convencer a los 127 senadores que lo acompañarían en el ejercicio legislativo le resultará mucho más complicado que en el Congreso de Jalisco, cuyo apoyo le sirvió al independiente a sacar adelante iniciativas como #SinVotoNoHayDinero.

“Kumamoto ha demostrado ser muy hábil para tejer alianzas y hacer que algunas de sus iniciativas se tradujeran en leyes al ponerse de acuerdo con bancadas de otros partidos”, explica.

Sin embargo, aplaude que se impulsen iniciativas enfocadas a transformar el sistema de ahorro para el retiro. “Kumamoto plantea principios que serían deseables, como reducir la fragmentación del sistema de pensiones y ampliar la cobertura a todos, son dos principios con los que sería difícil oponerse”.

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