Con canal azolvado, Vecinos de Villa del Ixtépete temen por más inundaciones
Piedras, tierra, escombros y mucha basura permanecen depositados en el canal El Garabato, lugar donde cada año provoca el temor de los vecinos por sus constantes desbordamientos
Piedras, tierra, escombros y mucha basura permanecen depositados en el canal El Garabato, el cual baja con escurrimientos desde el bosque La Primavera y que entre los muchos asentamientos cruza Villas del Ixtépete, en Zapopan, lugar donde cada año provoca el temor de los vecinos por sus constantes desbordamientos, por lo que demandaron la atención de las autoridades.
El punto conflictivo es el cruce de Aztlán y José López Portillo, donde un puente confinó el canal en tres colectores de poca capacidad que se pueden taponear fácil con el material que arrastra el agua.
Francisco Ceja, quien es geólogo, resultó afectado en el 2018, pues el agua se metió a su tlapalería y se llevó con ella los 19 mil pesos de cemento que tenía para venta. Desde entonces, ya no vende cemento.
Cuando llegó a vivir al lugar se dio cuenta de que la forma del canal era anormal. ''Viene de oeste a este y de repente hace un ángulo recto hacia el sur. Cuando eso sucede desde el punto de vista geológico es que hay una falla, pero aquí no hay evidencia de fallas''.
Averiguó por vecinos que el arroyo iba derecho, pero los desarrolladores del fraccionamiento al sur lo desviaron para construir más casas, lo que perjudicó a los demás.
''Lo que deben hacer es ampliar ese canal, que la gente de aguas arriba no tire basura y desazolvar, vinieron este año, pero solo desazolvaron el colector del centro, los de los lados, no''.
María del Carmen Pérez resultó afectada el año pasado. ''No duerme uno cuando está lloviendo, está uno al pendiente por el miedo, un día estábamos cenando y estaba la lluvia fuerte y la niña me dijo, ‘¡Mira, mamá!’, y el agua ya estaba arrastrando macetas y todo''.
El año pasado el agua dañó las camionetas de Ismael Villalvazo, otro vecino que no recuperó las pérdidas; incluso, el ingeniero de la obra se robó su escalera y una extensión de 20 metros que le prestó.
''Nosotros vimos que el canal no está bien hecho, ahí ya se le hizo una cueva'', y señaló un agujero debajo de la barda que puede colapsar si no se repara, por lo que ya esperan resignados el siguiente desbordamiento.
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