Sobreviven como pueden, a tres años del cierre vial
Cerca de Plaza de la Bandera los cierres están por cumplir tres años y han afectado a múltiples negocios
Un negocio de refacciones y reparación de motocicletas empolvado aún opera en Avenida Revolución y Constancia, pese a que a éste solo se puede llegar por una accidentada banqueta con excavaciones. Gregorio Hernández, su dueño, describió resignado su situación: “La clientela ya no se nos arrima porque no hay accesos, estamos totalmente incomunicados”.
Ya son tres años desde que cerraron la circulación sobre esa vialidad, desde la Calzada del Ejército hasta Fray Domingo de Alzola, y aún existen puntos casi aislados donde los comerciantes apenas sobreviven.
Al cruce de Bajío se puede ver un autolavado en ruinas, junto a una fila de locales abandonados y vandalizados. Frente a este, la Avenida Revolución luce sin pavimento y cercada para resguardar cientos de herramientas de construcción sobre la Estación Plaza de la Bandera.
Los vecinos de Gregorio ya no aguantaron la situación. “Están cerrados; ya tronaron”.
Y pese a que se anunció que el Gobierno los asistiría cuando menos en los impuestos municipales, afirma que no les han dado nada. “Nos dijeron que nos iban a condonar la licencia municipal en lo que pasaba la construcción y el año pasado a mí me clausuraron y me multaron”.
Se buscó al Sistema de Tren Eléctrico (Siteur) para preguntar por la falta de apertura; respondió que la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) está a cargo. La dependencia federal dijo que es la Semov, pero ésta negó poder hacer algo porque ni calle hay.