Reportan inundaciones más severas y con tierra
Ciudadanos señalan que desde la construcción de la Línea 3 del Tren Ligero el problema se agudizó; vecina de Lagos del Country asegura que siempre ha habido encharcamientos en la colonia
La zona de Avenida Ávila Camacho y De La Presa es uno de los 114 puntos de inundación de la Zona Metropolitana de Guadalajara, de acuerdo con el Sistema Intermunicipal de los Servicios de Agua Potable y Alcantarillado (SIAPA).
Pese al historial adverso, comerciantes y habitantes de las colonias Jardines y Lagos del Country consideran que desde que comenzaron a construir la Línea 3, en Avenida Ávila Camacho, se incrementaron las inundaciones.
“El año pasado llovía poquito y se inundaba rápido toda la calle de Avenida de la Presa, inclusive aquí entró arena y agua”, comentó Lourdes, quien trabaja en un taller mecánico ubicado sobre esta vialidad.
La señora Guadalupe, de Lagos del Country, comentó que siempre ha habido encharcamientos en la colonia. “Sin embargo ahora el nivel del agua tarda más en bajar y llega mucha tierra. Amanece todo sucio aunque llueva poquito y antes no”.
De acuerdo con el SIAPA, otro lugar en donde históricamente se inunda es la lateral de Periférico y Arco Pertinax, en Arcos de Zapopan. Incluso en ese punto falleció un menor en 2007 al caer en una boca de tormenta. El hecho quedó inmortalizado a través de una construcción para recordar su memoria.
“Aquí siempre ha sido conflictivo, pero de dos años para acá el agua tarda más en irse. Creemos que es porque construyeron la Línea 3”, compartió la señora Laura, vecina de la colonia. En un recorrido se observó basura en las alcantarillas de la zona.
PROTECCIÓN CIVIL TAPATÍA
Señalan que el caos es generado por la basura
De los 287 puntos de riesgo que reporta el municipio de Guadalajara, 176 son inundaciones y 111 encharcamientos. El director de la Unidad de Protección Civil tapatía, Felipe de Jesús López, explicó que se refieren a “inundación” cuando el agua rebasa los 40 centímetros en vía pública.
El funcionario detalló que para aminorar las inundaciones en la metrópoli trabajan 120 bomberos al día a través de cinco bases distintas. “En lo que va de la administración se ha trabajado mucho en limpieza de vasos reguladores. Hay que ver cómo funcionan las obras que está haciendo el SIAPA. Puedo decir que en los últimos dos años no hemos tenido inundaciones tan fuertes”, aseveró.
De Jesús López mencionó que trabajan en coordinación con otros municipios para que los elementos se muevan a zonas riesgosas. “Si, por ejemplo, llueve en la Colonia Insurgentes de Tonalá, se va al Parque de la Solidaridad para prevenir”.
Pese a los esfuerzos, el director aseveró que la basura que tiran los ciudadanos agrava la mayoría de las inundaciones en la metrópoli. Resaltó que incluso han detectado que hay personas que en cuanto comienza a llover sacan su basura a las calles.
“La semana pasada que llovió hicimos un recorrido y los canales estaban limpios, pero los ciudadanos, en menos de ocho días, aventaron 50 llantas en un arroyo, se requiere que la gente ponga de su parte”.
Felipe de Jesús López añadió que son toneladas de desechos las que recolectan de canales y arroyos. “La mayoría de los problemas por inundaciones en vía pública es por la basura. Hay que entender también que si la tiran en partes altas va a afectar a otros lugares”.
LA VOZ DEL EXPERTO
Falta ordenamiento urbano real
Luis Valdivia Ornelas (coordinador de la licenciatura en Geografía de la UdeG)
El coordinador de la licenciatura en Geografía de la Universidad de Guadalajara (UdeG), Luis Valdivia Ornelas, consideró que apostarle a la construcción de más colectores es una medida paliativa para el tema de las inundaciones, sin embargo no es la solución de fondo.
“Es el modelo de crecimiento urbano que altera el cauce del agua. Por ejemplo, el diseño de cotos, con una barda perimetral, hace que se convierta en un dique que impide el paso del agua”, mencionó el investigador.
Valdivia Ornelas recordó que las urbanizaciones en partes altas y medias afectan a las zonas más bajas de la ciudad. También puntualizó que el pavimento hidráulico no permite que el agua que cae se infiltre en la tierra.
“Una opción es hacer tanques de retención y vegetación, la cual puede captar entre el 18 y 25 por ciento de una tormenta”, observó.
El académico dijo que por las urbanizaciones en los últimos 10 años, aumentaron inundaciones en zonas como Santa Margarita, Santa Fe, Nextipac, Las Pintas, Belenes y Zona Valles.
“Las cuencas van más allá de los límites municipales. Tiene que haber una visión metropolitana con definición de zonas con vocación de urbanización. Se tiene que ver desde el Imeplan, planes parciales, manejo integral de cuencas y políticas diferenciales”, subrayó.
Luis Valdivia Ornelas adelantó que en dos o tres meses presentarán una actualización del trabajo de inundaciones, en la que se presentará el problema por polígonos y por nivel de peligrosidad. “Identificamos en 2017 entre 300 y 350 sitios con problemas. Pensamos que ha aumentado. Esto tiene un efecto en los peatones y en el tránsito vehicular”.