Jalisco apoya a niños con cáncer por dos meses
Ante el desabasto de medicinas, el Gobierno estatal promete también garantizar el tratamiento a pacientes con hemofilia
Aunque ya llegaron a Jalisco algunas dosis para enfermos de cáncer atendidos en el Hospital General de Occidente (HGO), el desabasto de medicamentos que se recrudeció a inicios de año también ha impactado a niños que padecen hemofilia. Ayer, pacientes de ambas enfermedades salieron a protestar porque tienen hasta cuatro meses sin su tratamiento.
Los niños y sus padres se plantaron en Palacio de Gobierno para exigir una respuesta de las autoridades estatales. Y el Gobierno del Estado respondió: se hará un gasto extraordinario para garantizarles acceso al tratamiento completo… pero sólo durante los próximos dos meses.
El gobernador, quien los recibió, les dijo que se destinará una partida de entre cuatro y 4.5 millones de pesos a fin de mantener el abasto de febrero y marzo en medicinas para la hemofilia y el cáncer. Eso mientras llega la compra consolidada del Gobierno federal.
El titular del Ejecutivo estatal afirmó que “cueste lo que cueste, y aunque no sea un asunto de nosotros (insistió en que la demora es responsabilidad de la Federación), voy a meterle recursos para comprar, de inmediato, todo lo que se necesite”.
Ese paliativo no está contemplado en la distribución de gastos para 2020, pero saldrá de la Secretaría de Salud estatal. Así que, de entrada, los padres de los pacientes que ayer se manifestaron le entregaron un listado de afectados al secretario de Salud, Fernando Petersen.
Y como todavía no hay un acuerdo en torno a la adhesión de Jalisco al Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi), se dejó en claro que no se puede garantizar la continuidad de este apoyo después de marzo.
El secretario precisó que son alrededor de 600 los pacientes con hemofilia en los centros de salud que hay en la Entidad (tanto federales como estatales); 48 de ellos son niños y todos ellos están en el Hospital General de Occidente.
“Tenemos que trabajar todos juntos para darle solución al problema”, enfatizó el secretario estatal.
Hasta el miércoles por la noche, con un lote de la Federación que llegó de última hora, el porcentaje de abasto se encuentra entre 80 y 85 por ciento. No obstante, los tratamientos se reanudarán hasta el lunes.
Luchan por la salud de sus hijos
Yanet Torres vino a Guadalajara desde la región Altos Sur; del municipio de Jesús María. Está desesperada, pues su hijo de nueve años, enfermo de leucemia, sufre ante el desabasto de medicinas contra el cáncer que registra desde septiembre el Hospital General de Occidente (HGO). “Un par de meses los estuvieron cubriendo de vez en cuando, pero desde noviembre no nos cubren nada”, lamentó. Ayer, decenas de padres de niños que padecen cáncer y hemofilia tomaron el Centro tapatío para captar la atención de las autoridades y exigirles que se normalice la entrega de medicamentos, pues la vida de sus pequeños está de por medio.
El tumor de Angeline crece; su tratamiento concluiría en febrero
Angeline tiene cuatro años, y tres de ellos ha luchado contra un tumor que se encuentra detrás de su ojo izquierdo. La diagnosticaron en junio de 2017, cuando vino a Guadalajara con su mamá desde Zacoalco de Torres al Hospital General de Occidente.
La niña ha recibido quimioterapias desde que era bebé. Según la prescripción de los médicos su tratamiento concluiría en febrero, pero esa fecha se ha postergado debido a que desde noviembre pasado le notificaron que había desabasto de medicamentos.
El retraso, cuenta su mamá, es grave porque al transcurrir más tiempo sin acceso a un tratamiento, el cáncer ha evolucionado. Es muy probable que Angeline tenga que volver a comenzar.
Lo peor es que la falta del tratamiento ha hecho que su ojo le duela y se le inflame cada vez más. El tumor está creciendo de nuevo.
“Además del gasto en traslado tendríamos que gastar en quimioterapias, que cuestan como cinco mil pesos cada una. Y le faltan 18”, dijo su mamá, Patricia, quien dice estar desesperada porque requiere desembolsar 90 mil pesos que no tiene para auxiliar a su pequeña.
Angeline es sólo una de las pacientes que ayer se plantaron en Palacio de Gobierno para atraer la mirada de las autoridades locales a fin de que les ayuden a acceder a su tratamiento.
No sólo los enfermos de cáncer sufren por desabasto. También los pacientes con hemofilia (una enfermedad que provoca hemorragias) están exasperados por la situación.
Dorlan, de tres años, es uno de ellos. Él no recibe sus inyecciones desde hace un mes. “Le tengo que prohibir todo. No puede jugar ni nada, tiene que estar quieto porque una caída es un sangrado. De por sí, puede tener sangrados espontáneos”, compartió su mamá, Ahtziri Juárez.
Junto con Dorlan, otros 47 niños con esa enfermedad se atienden en el Hospital General de Occidente.
Hermanos sufren sin tratamiento; gastarían 190 mil por semana
Julián y Mauricio, hermanos de ocho y 13 años, respectivamente, padecen hemofilia B; es decir, su sangre no coagula adecuadamente. Y para ellos, los últimos cuatro meses han sido muy pesados porque no han recibido tratamiento.
“Cuando voy a cita al Hospital General de Occidente no me cumplen. El más chico necesita ocho medicamentos y el más grande, 12. Pero a veces me dan cinco; otras veces cuatro o hay días que vuelvo a casa con las manos vacías”, lamenta Angélica Martínez, su mamá.
Su padecimiento es delicado, pues incluso puede ocasionarles hemorragias espontáneas. Por eso el acceso a sus medicinas es indispensable.
De hecho, la situación actual de desabasto ya ha repercutido en su salud, pues un día, Julián se dio un golpe en la cabeza y eso le ocasionó una hemorragia. Fue a urgencias pero “me mandaron a mi casa: ‘¿Sabes qué? No hay medicamento. Vente mañana’. Fuimos al día siguiente y nada”, compartió.
En otra ocasión recibió un golpe que le produjo fisuras en el cráneo, y eso a su vez le ocasionó ataques de epilepsia.
Un obstáculo adicional para Julián y Mauricio está en el precio del tratamiento. Cada aplicación cuesta, en el sector privado, alrededor de 38 mil pesos. Y como entre los dos requieren de cinco sesiones, sus padres tendrían que desembolsar 190 mil pesos por semana; 760 mil pesos al mes.
Dilatan la audiencia por Insabi
A pesar de que el gobernador de Jalisco ha solicitado, desde mediados de enero, una reunión con el Presidente Andrés Manuel López Obrador para discutir la propuesta local de coordinación con el nuevo Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi) sin adherirse a él, no hay fecha de recepción todavía.
“Tengo ya un buen rato pidiendo cita. Todavía no tengo una fecha definida por él. Es un asunto en el que he insistido, pero no hay respuesta, confío en que pronto se destrabe esto, ante esta situación lo que decidimos desde ayer fue enviar el proyecto de convenio de no adhesión con ajustes... directamente al director del Insabi (Juan Antonio Ferrer)”, comentó el mandatario estatal.
Jalisco, enfatizó, no se sumará a la estrategia federal porque el Estado no entregará su sistema de salud. “Tenemos que hacer un modelo de coordinación en el que el Estado cumpla con sus responsabilidades, que no se entregue el sistema, pero garantizamos cumplir el compromiso de que la atención médica sea universal y gratuita”, agregó.
La propuesta de coordinación con el Insabi también contempla que en Jalisco existan hospitales “de acceso universal; es decir, que pueda ir población (derechohabiente) del Seguro Social y población abierta”.
“Hace mucho que hay desabasto”
La crisis por medicinas no es nueva. El secretario de Salud en Jalisco, Fernando Petersen Aranguren, afirmó que el desabasto de fármacos para atender a pacientes enfermos de cáncer no inició en septiembre. “Tiene mucho tiempo”, reconoció ayer.
Una de cada tres muertes en 2025 será por cáncer
Una de cada tres muertes en el mundo en 2025 estará relacionada con algún tipo de cáncer, enfermedad que en 2018 presentó 18.1 millones de nuevos casos a nivel global y 9.6 millones de muertes.
“Los estilos de vida han impactado de manera importante. En México y Latinoamérica, factores como el tabaquismo y la obesidad recrudecen los pronósticos”, dijo Jerónimo Rodríguez, especialista en medicina interna adscrito al Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias (INER) de México.
Previo al Día Mundial de la Lucha contra el Cáncer (4 de febrero), detalló que actualmente esta enfermedad representa la segunda causa de muerte en el mundo, pero a diferencia de otras décadas, ya no es sinónimo de muerte.
En México, este padecimiento en todos sus tipos representa 14% de la mortalidad y, según cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), de los 191 mil nuevos casos de 2018, sólo hubo 84 mil muertes a nivel nacional. Menos de la mitad.
Concluyó que, si se controlan los factores de riesgo modificables, también se podrían reducir 30% los casos nuevos y el mismo porcentaje en gastos de atención.
EFE