Inspectores piden “mochada” para dejar operar tragamonedas
Cobran de 700 hasta mil pesos al mes, denuncian comerciantes que operan estos aparatos; sin embargo, las máquinas dejan ganancias hasta por 12 mil pesos
“Máquinas tragamonedas nuevas y usadas”, se puede ver en una de tantas publicaciones en Internet donde se ofertan estos aparatos que, pese a estar regulados por la Ley Federal de Juegos y Sorteos, se adquieren fácilmente.
De acuerdo con uno de los comerciantes que las usan, las hay desde los cuatro mil 500 a los 15 mil pesos y pueden ser operados con tranquilidad al darles dinero a los inspectores.
“Les damos su ‘mochada’. Para dejarlos tranquilos —y depende de las máquinas que tenga en la zona—, les doy de 700 a mil pesos al mes”, comentó.
Sin embargo, las máquinas producen más, desde tres mil pesos mensuales en las colonias donde menos generan ganancias hasta 12 mil en las mejores zonas.
Pese a los casos de corrupción, las respectivas direcciones de inspección municipales decomisan cientos de estos aparatos. Zapopan, por ejemplo, ha incautado 893 desde octubre de 2019, de las cuales se extrajeron 146 mil pesos.
En Tlajomulco han retirado, tanto en operativos como por reportes ciudadanos, 103 máquinas en la administración, de las que ya destruyeron 68, informó Óscar Zaragoza, director de Inspección, Vigilancia y Responsabilidad Civil, quien atribuyó la proliferación de estos aparatos a la necesidad económica de los dueños de los giros, no a los inspectores.
“Generan un ingreso adicional a su negocio. En muchas de las ocasiones las maquinitas no son propiedad de la misma gente del negocio, si no de personas que llegan, las instalan y les dan un porcentaje”, declaró.
No obstante, Zaragoza admitió que está en manos de las autoridades el poder erradicar la proliferación de estos objetos. “Aumentar los operativos nos ayudaría muchísimo a inhibir que personas de estos establecimientos quisieran tenerlos”.
Fernando Espinoza de los Monteros, investigador de la Universidad de Guadalajara, explicó que si operan estos aparatos es gracias a la corrupción. “Si ellos aplicaran la ley, pues quitarían todas”.
Rebasan a las autoridades de la metrópoli
Pese a que las autoridades municipales y federales constantemente presumen destrucciones de máquinas tragamonedas, sus acciones no inhiben que éstas proliferen. En un recorrido por los municipios de la Zona Metropolitana de Guadalajara, este medio confirmó que los aparatos pueden encontrarse fácilmente y que ahora ya ni se molestan en ocultarlos, sino que se exponen a la vista en tiendas o incluso sobre las banquetas, donde los inspectores podrían identificarlos y retirarlos fácilmente. La operación de juegos de azar está regulada por la Secretaría de Gobernación (Segob), pero los municipios sí tienen atribuciones para quitarlas, según sus reglamentos de giros comerciales.
Reglamentos municipales de la ZMG prohíben su operación
Aunque algunos no incluyen el concepto de tragamonedas, los reglamentos de comercio de la Zona Metropolitana de Guadalajara (ZMG) las prohíben si no cuentan con permiso de la Secretaría de Gobernación (Segob).
Guadalajara es el único que cuenta con reglamento para centros de apuestas y casinos, donde se exige además un holograma municipal.
En el caso de Tlajomulco, incluye en su Reglamento de Giros Comerciales la exigencia del holograma y la prohibición de estas máquinas fuera de negocios sin permiso de la Segob.
El municipio de Tonalá también las veta en su Reglamento de Comercio y aclara que los infractores quedarán sujetos a las sanciones de la legislación aplicable.
En las leyes de Zapopan, su Reglamento para el Ejercicio de Giros Comerciales no alude a las máquinas tragamonedas, aunque su Capítulo 10, que regula los juegos de azar, indica que los éstos deben contar con permiso federal.
Finalmente, aunque Tlaquepaque no se refiere a este tipo de aparatos, su Reglamento de Comercio indica que las máquinas electrónicas, juegos de video y similares operarán en giros de control especial y que están prohibidas las apuestas “a propósito de los juegos en las máquinas”.