En 22 años, pierden registro estatal 15 partidos políticos
Los institutos desaparecidos costaron al erario 179 millones de pesos; actualmente hay 17 organizaciones buscan su registro para competir en las elecciones de 2021
Desde 1997, 15 partidos políticos han perdido su registro en Jalisco: 11 no lograron superar los cuatro años de existencia.
De acuerdo con el Instituto Electoral y de Participación Ciudadana (IEPC), el Cardenista y el Popular Demócrata Mexicano operaron durante décadas y desaparecieron a finales del siglo pasado.
El Nueva Alianza es la baja más reciente. Se extinguió tras los comicios de 2018, después de 13 años de trayectoria.
Sin embargo, este panorama no impide que otros proyectos similares busquen encaramarse en la escena política de la Entidad. A principios de este mes, el IEPC dio a conocer que 17 organizaciones intentan consolidarse para competir en las elecciones de 2021.
Entre ellas están Futuro, encabezada por Pedro Kumamoto, ex diputado local; Hagamos, que lidera el legislador Enrique Velázquez, y Confío, de Salvador Cosío, ex candidato a la gubernatura.
Jesús Ibarra, académico del ITESO, acentuó que la mayoría no sobrevivirá. Explicó que los filtros para la instauración de nuevos partidos han mejorado pues ninguna agrupación emergente recibirá recursos hasta que demuestre que tiene una representatividad de al menos 3% de los votos.
Los partidos extintos en Jalisco costaron 179 millones de pesos
Los 15 partidos políticos que desaparecieron desde 1997 en Jalisco costaron a los ciudadanos 179 millones de pesos.
Como respuesta a una solicitud de información, vía Transparencia, el Instituto Electoral y de Participación Ciudadana (IEPC) destacó que, entre enero de 1997 y julio del año pasado, otorgó 42.6 millones a 14 de ellos.
Sin embargo, la institución resaltó que la mayor parte del monto la recibió el Partido Nueva Alianza (Panal), que obtuvo más de 136.6 millones de pesos entre 2005 y noviembre de 2018.
En el documento entregado, el IEPC acentuó que los recursos destinados a esa agrupación se multiplicaron en los 13 años que operó en el Estado, pues de administrar al principio 2.5 millones, pasó a tener casi 32 millones en su último año de actividades.
En la actualidad, existen ocho partidos políticos en la Entidad. Sin embargo, el financiamiento que la autoridad electoral les entregará en 2019 representa apenas una cuarta parte de lo que les proporcionó en 2018.
Esta reducción se debe a que este año no es electoral y a la puesta en marcha de la ley #SinVotoNoHayDinero, que fue impulsada por Pedro Kumamoto cuando fungió como diputado local en la pasada Legislatura.
Esta iniciativa fue aprobada por el Congreso en junio de 2017, pero fue impugnada por el Partido Verde Ecologista de México (PVEM) y por el Partido Acción Nacional (PAN). El debate llegó hasta la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), que declaró su constitucionalidad en agosto de ese año.
Los recursos para este año se calculan al multiplicar el padrón electoral por 20% del valor diario de la Unidad de Medida y Actualización (UMA), por lo que los partidos dispondrán este año de 99.6 millones de pesos.
Falta fiscalizar recursos que provienen de actores privados
Jesús Ibarra (académico del ITESO)
Para el especialista, el camino a recorrer para un partido político emergente no es sencillo. “Tienen poco dinero y muchos gastos operativos, principalmente de su funcionamiento interno. Y cuando hay elecciones no tienen para financiar campañas”.
Explicó que, en consecuencia, se ven obligados a buscar recursos de fuentes privadas, lo que lleva a que se den “contabilidades ocultas” y eventuales pagos de favores, por lo que estos recursos son “el germen de la corrupción política”.
Precisó que se requiere una fiscalización que evite que los partidos tengan esta doble contabilidad. Sin embargo, comentó que a pesar de estas prácticas, el manejo de los recursos ha mejorado recientemente.
Por último, indicó que debido a que los costos de las campañas son superiores a los montos que otorgan las instituciones electorales, es común que los partidos que tienen acceso al erario público desvíen fondos para destinarlos a la competencia.
Caras conocidas… con nuevos colores
Algunas de las agrupaciones que buscan llegar a las boletas en 2021 están conformadas por personajes con trayectoria en la vida política de Jalisco.
Resaltan los proyectos de Enrique Velázquez, Pedro Kumamoto y Salvador Cosío, quienes anteriormente han tenido cargos de elección popular.
Velázquez pretende transformar la agrupación Hagamos en un partido del mismo nombre. Explicó que muchos de los afiliados son miembros de la comunidad universitaria interesados en la vida pública, por lo que pueden ofrecer un acercamiento con pensamiento académico a los problemas del Estado.
Por otra parte, la intención de Kumamoto y los integrantes de Wikipolítica es cristalizar a Futuro como otra fuerza en la Entidad para redefinir el papel de los partidos políticos y llevar a cabo alianzas con organizaciones de la sociedad civil y estudiantes.
En el caso de Cosío, quien quiere poner en el ring político a Confío, dijo que “los partidos pueden ser entes útiles, no solamente maquinarias electoreras”. El ex candidato a la gubernatura insistió en que su meta es aumentar la calidad de vida en Jalisco.
Además de los mencionados, otras 14 asociaciones luchan por conseguir el objetivo. Si lo logran, se denominarán MÁS, Partido Antiabortista Provida, Unidos Podemos, Movimiento Nueva Era, Podemos X Jalisco, Partido por la Vida, Podemos Jalisco, México Entregado a la Transformación, Independientes Unidos por Jalisco, Avancemos, Unión por la Patria, Jalisco en Acción, UNE México y Partido Reformista.
Pasos para crear un partido
Para conseguir el objetivo, deben llevar a cabo asambleas en 14 distritos u 84 municipios del Estado. También tienen que realizar una asamblea estatal constitutiva en la que aprueben sus estatutos, declaración de principios y programas que normarán sus actividades. Además, el número de afiliados no podrá ser menor a 0.26% del padrón electoral del Estado que se usó en los últimos comicios locales.