Nómina y deudas ahogan al SIAPA
De un presupuesto anual de 5,894 millones de pesos, apenas 430 millones se destinan a la inversión pública y obras
Los tapatíos reprueban el servicio de agua potable, frente a los problemas por la falta de agua o la intermitencia del líquido en sus casas, por el agua turbia, las fugas y los socavones. Y el gasto en la nómina y en el pago de las deudas es lo que limita la falta de inversión pública para resolver los problemas que enfrenta el Sistema Intermunicipal de Agua Potable y Alcantarillado (SIAPA).
Para este año, el organismo tiene un presupuesto de 5,894 millones de pesos, pero 1,713 millones se destinan al pago de la nómina o la plantilla laboral.
A pesar del aumento en el número de trabajadores, en esta administración se incrementó el pago hacia empresas privadas que realizan servicios de cobranza, consultoría, capacitación, servicios de administración y vigilancia; es decir, en lugar de aprovechar a los empleados de base, de confianza o supernumerarios, pagarán este año más de 545 millones de pesos en empresas privadas. En otras palabras, cuatro de cada 10 pesos que gasta el SIAPA se destinan a la nómina y al pago de empresas privadas, mermando la inversión pública para renovar las redes hidrosanitarias, que tienen entre 60 y 92 años de antigüedad en zonas como Centro, Barrio de Analco, Capilla de Jesús, La Loma, Moderna, Sagrada Familia, Belisario Domínguez, La Perla y Balcones de Oblatos, entre otras, como se dio a conocer en la última comparecencia del titular del sistema en el Congreso de Jalisco, Carlos Enrique Torres Lugo, donde recibió fuertes reclamos por el agua turbia que está llegando a las casas.
Tras un sondeo con cibernautas de esta casa editorial, coincidieron en que hay reportes de fugas de agua o socavones que tienen más de dos meses sin atenderse.
El ejemplo es un hoyanco en la calle Paseo de los Robles, entre Patria y Duelo, en la Colonia Villa Universitaria de Zapopan, que duró casi tres meses para ser reparado. Hugo López, gerente operativo de la Junta de Colonos, acentuó que hicieron el reporte ante el SIAPA y diversas dependencias.
Un sondeo en las plataformas digitales de este medio reveló que seis de cada 10 participantes se quejaron de la mala calidad del agua.
Desde el año pasado se solicitó una entrevista con el director del organismo para abordar el tema del gasto en la nómina, en empresas privadas y sobre las fallas del sistema, pero no se concedió. Mientras tanto, del erario se pagan altos salarios entre funcionarios de primer nivel. Por ejemplo, Carlos Enrique Torres Lugo le cuesta al erario 101,422 pesos al mes y recibe 2,571 pesos de apoyo para transporte, así como otros 3,676 pesos para despensa. Ese salario es mayor al que perciben los alcaldes de Guadalajara o Zapopan, que rondan los 90 mil pesos mensuales. Y casi duplica el sueldo de los munícipes de Tonalá o El Salto.
Por otra parte, los directivos reciben entre los 62 mil y 69 mil pesos mensuales, equiparándose con lo que gana la mayoría de los presidentes municipales del Área Metropolitana de Guadalajara.
En enero de 2019 el SIAPA tenía una deuda con proveedores y bancos por 3,593 millones de pesos, mientras en diciembre pasado se disparó a más de 4,464 millones de pesos. Por esa deuda acumulada, el sistema paga anualmente más de 454 millones.
Entre el pago de la nómina, los servicios contratados por empresas y el pago de las deudas, al SIAPA se le va más de la mitad del presupuesto anual. El resto se ejerce en servicios generales y materiales, principalmente.
CT