Zuckerberg afirma que sus datos también fueron vendidos
Cambridge Analytica usó datos de Facebook para elaborar perfiles psicológicos de votantes que vendió, entre otros, a la campaña de Trump
El presidente de Facebook, Mark Zuckerberg, aseguró ayer ante el Congreso de EU que sus datos personales fueron vendidos sin su consentimiento a la empresa de consultoría política Cambridge Analytica, que accedió a la información de 87 millones de usuarios.
Zuckerberg compareció ante el comité de Energía y Comercio de la Cámara de Representantes, después de responder este martes a las preguntas de 44 de los cien senadores en otra audiencia.
En su comparecencia, el millonario reiteró que los usuarios tienen total control sobre sus datos, pero tuvo que admitir que su propia información personal acabó en manos de Cambridge Analytica, que usó información de Facebook para analizar los perfiles psicológicos de usuarios e tratar de influir en sus decisiones.
"Cada vez que alguien elige compartir algo en Facebook, hay un control. Está ahí. No está enterrado en la sección de configuración, está ahí mismo", insistió Zuckerberg ante las duras preguntas de los legisladores de ambos partidos, que hicieron patente su frustración.
Uno de los momentos cruciales de la audiencia llegó cuando la legisladora demócrata Anna Eshoo preguntó a Zuckerberg sobre si su propia información personal fue vendida a "terceras partes", a lo que el directivo contestó con un breve "sí", mientras asentía con la cabeza.
El escándalo de Cambridge Analytica estalló en marzo, cuando varios medios revelaron que la empresa había usado datos de Facebook para elaborar perfiles psicológicos de votantes que supuestamente vendieron, entre otros, a la campaña del ahora presidente Donald Trump durante las elecciones de 2016.
En la audiencia, Zuckerberg anunció que Facebook comenzó a notificar este mismo lunes a los usuarios que habían visto comprometidos sus datos con Cambridge Analytica.
No aclaró, sin embargo, cuántas notificaciones ha enviado Facebook a los 87 millones de usuarios, la mayoría en Estados Unidos, que fueron víctimas de los abusos de Cambridge Analytica.
Después de entonar el martes el mea culpa por el escándalo de Cambridge Analytica, Zuckerberg volvió a asumir responsabilidades y aseguró que está tomando medidas para que no se repita un incidente similar, así como para controlar la difusión de "noticias falsas" por agentes extranjeros.
Sin embargo, los legisladores de ambos partidos reiteraron su desconfianza en Facebook, algunos incluso dijeron sentirse "decepcionados", y volvieron a insistir en la idea de aprobar una regulación que proteja el derecho a la privacidad en Internet y ponga límites a gigantes tecnológicos.