Trump quiere que muro fronterizo sea negro, aunque cueste millones
El objetivo, de acuerdo con medios estadounidenses, es que la valla sea mucho más caliente en el verano para evitar que la trepen, además de que se verá más intimidante
El presidente estadounidense, Donald Trump, está decidido a que el muro en la frontera con México se pinte de negro, aunque la pintura añadiría al menos 500 millones de dólares en costos, revela este miércoles el diario estadounidense The Washington Post, con base en estimados de contrastistas del gobierno.
"Trump quiere la cerca pintada. Estamos modificando los contratos para añadir eso"
La idea de que el muro sea negro no es nueva. El objetivo, de acuerdo con medios estadounidenses, es que absorba más calor y sea mucho más caliente en el verano, cuando se incrementan los cruces de migrantes en la frontera, para evitar que lo trepen.
Funcionarios fronterizos y comandantes militares enterados del proyecto señalan que la pintura es innecesaria, además de costosa, y en las especificaciones de diseño originales que se dieron a conocer no estaba incluida.
Pero de acuerdo con el Post, que habló con funcionarios de la administración, durante una reunión realizada el mes pasado en la Casa Blanca, Trump dijo a su yerno y asesor, Jared Kushner, y a otros colaboradores que continúen con el proyecto de la pintura y busquen estimaciones de costo. Además del calor, el otro argumento es que pintado de negro, el muro sería todavía más intimidante.
"Trump quiere la cerca pintada. Estamos modificando los contratos para añadir eso" dijo al rotativo un funcionario implicado en el proyecto del construcción.
El Post consiguió una copia de los costos estimados de pintura que presentaron contratistas y revela precios que van de 500 millones por dos capas de pintura acrílica hasta más de tres mil millones por una capa “premium” en el muro.
Después de olvidarse por algunas semanas del muro, en medio de la pandemia del coronavirus, el presidente retomó en los últimos días la idea, diciendo que se construye rápidamente. Ahora ya no está equiparando a los migrantes con criminales, sino señalándolos como amenaza de contagio del COVID-19.
JM