Piden a Brasil resguardar a venezolanos tras actos violentos
La cancillería venezolana expresa su preocupación por los “desalojos masivos” de sus connacionales
El Gobierno de Nicolás Maduro expresó su preocupación por las "informaciones que confirman ataques a inmigrantes venezolanos", luego de la situación que se presentó en la localidad de Pacaraima, Brasil, fronteriza con Venezuela, y pidió a ese país tomar medidas de "resguardo" de sus nacionales.
En un comunicado difundido hoy, la Cancillería venezolana también expresa su preocupación por los "desalojos masivos" de sus "connacionales, hecho que violenta normas de derecho internacional además de vulnerar sus derechos humanos".
Este sábado, un grupo de brasileños se manifestó en la localidad de Pacaraima contra la presencia de inmigrantes venezolanos, a los que les quemaron sus objetos personales y las tiendas de campaña en las que dormían, informaron fuentes oficiales.
Las protestas se iniciaron a partir de la agresión en la víspera a un comerciante local a manos supuestamente de un grupo de venezolanos, que, al parecer, intentaron asaltarlo cuando estaba en su casa con su familia, de acuerdo con las citadas fuentes.
En uno de los videos de las protestas divulgado en redes sociales se escucha a un brasileño decir que "están expulsando a los venezolanos" y "fuera venezolanos".
Por estos hechos, la Cancillería venezolana ha dicho que solicitó al Ministerio de Relaciones Exteriores de Brasil "las garantías correspondientes a los nacionales venezolanos y tomar las medidas de resguardo y seguridad de sus familias y enseres".
Asimismo, informó que ordenó al personal de su consulado en Boa Vista trasladarse "de inmediato" a Pacaraima para "constatar in situ el estatus de la situación y velar por la integridad de los ciudadanos venezolanos en la zona".
La Cancillería, que manifestó su "disposición de coordinación con las acciones que las autoridades brasileñas consideren necesarias", indicó que "aboga por la promoción y respeto del derecho internacional sin discriminación".
Rechazó igualmente lo que considera una "instrumentalización de una lamentable situación de violencia alimentada por una peligrosa matriz de opinión xenófoba, multiplicada desde Gobiernos y medios al servicio (...) del imperialismo".
GC