Policías trasladan un cuerpo recuperado en Escuintla, Guatemala, tras la erupción del volcán de Fuego.
El volcán, con una altitud de 3 mil 763 metros y situado a 35 kilómetros al suroeste de la capital, Ciudad de Guatemala, entró en erupción el domingo. Vista desde Alotenango, Guatemala. AP/L. Soto
Una mujer llora por sus familiares desaparecidos en San Miguel Los Lotes, un poblado del departamento de Escuintla.
La erupción envió nubes de ceniza y ceniza caliente mezclada con agua y escombros que bloquearon las carreteras y dejaron varias viviendas en llamas. AFP/Policía Nacional de Guatemala
Una víctima yace entre la ceniza en una casa en San Miguel Los Lotes. El barro volcánico barrió este pueblo, justo debajo de los flancos de la montaña.
Las autoridades han confirmado al menos 62 muertos. Eufemia García llora al enterarse que perdió a toda su familia. EFE/E. Biba
Aspecto de la erupción del domingo. AFP/Policía Nacional de Guatemala
El flujo piroclástico descendió en columnas del cráter del volcán, ubicado entre los límites de los departamentos de Escuintla, Chimaltenango y Sacatepéquez. AFP/Policía Nacional de Guatemala
Vehículos quedaron semi enterrados y cubiertos de ceniza. AFP/J. Ordonez
Un trabajador de los equipos de rescate de Guatemala ayuda a una niña el domingo en la población de El Rodeo.
Los restos de un pato que fue alcanzado por material volcánico.
Un bombero voluntario llora tras acudir ayer a El Rodeo.
Humo se eleva del flujo piroclástico en San Miguel Los Lotes.
Policías evacuan a un herido y pobladores en El Rodeo. AFP/N. Pérez
Un policía corre por un deslizamiento de fluido del volcán en San Miguel Los Lotes.
Un hombre rescata un cachorro.
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