Estados Unidos permitirá demandas de empresas confiscadas por Cuba
Mañana entrará el vigor la Ley Helms-Burton, que data de 1996; con esta medida, Trump se dispone a endurecer la política hacia la isla
Ejerciendo más presión sobre Cuba, el presidente Donald Trump se dispone a endurecer la política hacia la isla al permitir demandas contra empresas extranjeras que se hayan beneficiado de compañías estadounidenses que fueron confiscadas por el gobierno cubano tras la revolución de 1959, dijo el martes un alto funcionario del gobierno.
La decisión representa un cambio en más de dos décadas de política estadounidense hacia La Habana.
La Ley Helms-Burton de 1996 dio a los estadounidenses el derecho de demandar a empresas que lucren con propiedades confiscadas por Cuba, pero todos los presidentes estadounidenses desde Bill Clinton han suspendido una cláusula por temor a molestar a aliados estadounidenses y complicar las relaciones con el gobierno socialista.
El funcionario dijo que de aquí en adelante no se emitirán más salvaguardas. El funcionario habló bajo la condición de anonimato de cara al anuncio oficial.
El gobierno de Trump había dado señales de querer poner fin a las suspensiones. La medida es en represalia por el apoyo de Cuba hacia el presidente venezolano Nicolás Maduro, a quien Estados Unidos está tratando de destituir en favor del líder de oposición Juan Guaidó.
Se prevé que el asesor de seguridad nacional John Bolton hable sobre la nueva política durante un discurso que dará el miércoles en Miami, donde viven miles de exiliados e inmigrantes de Cuba, Venezuela y Nicaragua.
El discurso ante la Asociación de Veteranos de la Bahía de Cochinos marcará el 58 aniversario de la fracasada invasión estadounidense a la isla en 1961 para derrocar a Fidel Castro.
JM