Adelantan elecciones en España
El mandatario tomó la medida debido a que perdió una votación del parlamento
El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, convocó a elecciones generales anticipadas para el 28 de abril. La noticia de que los españoles tendrán que acudir a las urnas por tercera ocasión en menos de cuatro años se dio luego de que Sánchez perdió una votación presupuestaria en el Parlamento.
Sánchez perdió el respaldo legislativo esta semana después de que los separatistas catalanes se unieron a legisladores de oposición para rechazar su propuesta de gasto para 2019.
El funcionario consideró que no puede gobernar sin presupuesto y alegó que para que España pueda “avanzar” es necesario que los españoles se pronuncien si quieren un proyecto como el que él representa en el que “caben todos los españoles” o como el que representa la derecha “en el que solo caben ellos”.
“Entre no hacer nada y seguir gobernando con el presupuesto prorrogado de Mariano Rajoy o dar la palabra a los españoles, prefiero la segunda opción porque España debe continuar progresando”, insistió.
Sánchez reconoció que “sin presupuesto, uno no puede gobernar”, tras criticar a quienes han “bloqueado” la tramitación de unos “presupuestos sociales”.
El presidente derrocó a su predecesor, Mariano Rajoy, en junio del año pasado, al ganar un voto de censura provocado por una condena de corrupción que afecta al Partido Popular (PP).
Pero la mayoría simple de partidos que se unieron en su momento contra Rajoy se desmoronó en la última semana luego de que Sánchez se rehusó a aceptar un diálogo respecto a la autodeterminación de Cataluña como parte de las negociaciones actuales con los separatistas.
El líder del PP, Pablo Casado, festejó lo que llamó la “derrota” de los socialistas y atacó a Sánchez por ceder a algunos de los reclamos de los separatistas catalanes. “Nos toca decidir si España quiere seguir siendo rehén de los partidos que quieren destruirla, o un liderazgo del Partido Popular”, dijo.
Las encuestas de opinión indican que es poco probable que las elecciones produzcan a un claro ganador, lo que dejaría escaso margen de maniobra al vencedor de las próximos comicios.