Yigal, el ‘Chapo’ y la justicia
Se dice que ‘Lo que es justo o no, puede tener muchas interpretaciones y ser sensible a muchas circunstancias, dependiendo de la perspectiva que se adopte’. Y eso nos lleva a recordar una de las frases del filósofo Aristoteles, que destaca notablemente en alguna de sus 300 obras que escribió en su vida, y que se refiere precisamente a la interpretación del término: ‘La justicia como igualdad proporcional: Dar a cada uno lo que es suyo, o lo que le corresponde’.
No se trata de discernir sobre la justicia o reflexionar sobre la interpretación del término, más bien hacer referencia del término en la aplicación de dos hechos muy recientes que están relacionados con la impartición de la misma, la equidad, la imparcialidad y la neutralidad. Nos referimos a los casos de Yigal y al ‘Chapo’ Guzman.
Yigal R.G. es el joven que está detenido y quien presuntamente es responsable de provocar un accidente en donde tres jóvenes perdieron la vida en una de las principales vías de Guadalajara. Y el ‘Chapo’, el narcotraficante mexicano que fue el líder del Cártel de Sinaloa hasta su extradición a los Estados Unidos hace cuatro años.
El argumento sobre la causa del accidente según Yigal, fue que era perseguido cuando conducía su automóvil y se sintió amedrentado por sujetos que venían armados, lo que provocó a la postre que perdiera el control de su automóvil y se proyectara a los carriles opuestos donde provocó la carambola.
Sin embargo, este no es el primer incidente de Yigal. Una víctima más de este joven es Leslie, quien hace siete años cuando se dirigía a la universidad fue víctima de un alcance cuando conducía y un auto a alta velocidad la embistió. Ella quedó con heridas en la cabeza, fractura de fémur y otras serie de lesiones, que hasta la fecha no le permiten llevar una vida normal. Y al supuesto responsable -Yigal- nunca se encontraron los elementos para enfrentar un proceso legal en su contra.
El involucramiento en dos accidentes, donde -aparentemente- la irresponsabilidad, la imprudencia y la falta de precaución son el denominador común, no son obra de la casualidad o de los imponderables del conducir, sobre todo cuando se hace a alta velocidad. Y hoy la autoridad correspondiente anuncia y pregona ridículamente de que se le va a retirar la licencia de conducir, cuando por obvias razones es la mínima sanción que debe de recibir en caso de encontrarse culpable.
Y en el caso el ‘Chapo’, a quien su propia fama lo sentencia como culpable de una infinidad de delitos, sus abogados acaban de presentar argumentos para tratar de anular la sentencia de cadena perpetua -bajo el argumento de conducta inapropiada de algunos miembros del jurado- y que sea sometido a un nuevo juicio para que en el futuro pudiera aspirar algún día -muy lejano, si es que lograra un nuevo veredicto- a salir nuevamente a caminar a las calles.
En ambos casos, Yigal con un patrón de comportamiento -en los incidentes- que lo señalan como supuesto responsible, y el ‘Chapo’, donde las decenas de pruebas lo sepultan, deben ser objeto fiel a la interpretación al mensaje de justicia de Aristoteles, ‘Dar a cada uno lo que es suyo, o lo que le corresponde’. ¿Usted, qué opina?
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