Ya no aguantan a Alan Pulido
El Guadalajara tuvo a media semana, antes de enfrentar al Querétaro, una reunión de esas que los futbolistas llaman “asados”, donde se buscó cerrar filas y unificar los compromisos de cada jugador con el plantel.
En versión compacta, fue una reunión para que ya dejaran de andar de fiesteros, pero no todos hicieron caso, ya que uno en lugar de frenarse, pisó el acelerador, aprovechando que era su cumpleaños.
Alan Pulido anda desatado con ese tema de la fiesta y ya pocos le siguen el ritmo, claro, siempre estarán las rémoras que viven de los jugadores y que aplauden todo.
Pero la realidad es que el atacante del Rebaño ya tiene tiempo entre fiesta y fiesta, al nivel que en el coto donde vive sus vecinos ya están hartos de sus múltiples eventos, donde acusan que la música comienza a las 23:00 horas y termina por ahí de las cinco de la mañana. Otra cosa que molesta es que Pulido suele dejar sus autos de lujo sobre las vialidades, complicando el andar de los vecinos, pero esa es otra historia que luego les contaré.
El caso es que a un paso de enfrentar el duelo crítico ante los Gallos, Alan se festejó el jueves por adelantado su cumpleaños, donde acudió al restaurante Porfirios.
Hasta ahí todo iba bien, hasta que en el “plan tranqui” salió la opción de ir al Strana, uno de los antros de moda.
Ahí, el atacante fue el genio y figura, luciendo entre la pasarela de botellas Dom Perignon que alumbraban su mesa y que no paraban de llegar.
Pues la fiesta se fue para largo y los que estuvieron ahí aseguran que Pulido se retiró hasta las seis de la mañana del viernes, dándose cuenta que a las nueve horas estaba agendado su entrenamiento con Chivas, para después partir rumbo a Querétaro.
Ya en el partido, al delantero se le vio pesado y con poca movilidad, como si estuviera cansado, sin la potencia que lo caracteriza.
En la conferencia de prensa al concluir el juego, José Saturnino Cardozo le mandó mensaje a sus delanteros diciendo que les faltaba gol y ritmo, además de que se jugaban todo ante América.
Pero a su flamante atacante parece que los mensajes le entraron por una oreja y le salieron por la otra, porque todavía llegó a Guadalajara para rematar con la que fue su fiesta en serio… quién sabe cómo estuvo esa.
Hoyos no se deja
Como parece no interesarle volver a entrenar en México o al menos en un futuro cercano Ángel Guillermo Hoyos está dispuesto a cobrarle hasta el último peso de su contrato a la directiva del Atlas.
El timonel argentino se aferra a que le paguen el más de año y medio que le deben por cortarlo, así que esperen noticias porque el pleito se viene bueno y probablemente le pegue financieramente a las intenciones del Atlas de reforzarse en junio, como siempre.
Quien no sabe donde meter la cara es Pavel Pardo, quien recomendó al DT, quien contaba con grandes éxitos en el futbol de Bolivia.
Ahora entiendo por qué muchos extrañan a la antigua directiva, al menos ellos traían petardos, pero no pagaban caro.